"Este lugar me recuerda mucho lo que era la espera para consumir, estar expuesto, el miedo que me generaba", cuenta un exconsumidor de pasta base a Kairo Herrera.
El director de REMAR, Martín Álvarez, describe cómo es una boca de pasta base:
Una boca de pasta base es un lugar en donde hay personas que lo primero que quieren hacer es dinero, lo segundo es que quieren tener protagonismo, y lo tercero es -en alguna medida- ser conductores de toda esa destrucción. Me pasó de conocer a muchos que consumían y otros que no.
Un consumidor de pasta base, por su parte, cuenta qué cosas sirven para cambiar por la droga:
Todo viene bien. Después se vende. Hay gurises de siete u ocho años en la vuelta también.
Un exconsumidor agrega:
Lo que conviene es, si vos tenés unos championes vendérselos a alguien y con esa guita ir a la boca. Porque en la boca te dan lo mínimo, juegan con tu adicción. Con 16 años para consumir cocaína vendí libros de estudio o discos. Pero con la pasta base vendí hasta ropa, es indignante, pero además todo vale $20 ó $30.