Amodio Pérez: "Estoy luchando para que quede claro que yo no realicé señalamientos"

El exdirigente tupamaro dijo que él es el único que admitió haber colaborado con las FF.AA. "En cuanto pueda me vuelvo a España", agregó.

El jueves pasado, la Suprema Corte de Justicia absolvió al exdirigente tupamaro Héctor Amodio Pérez, tras desestimar el recurso presentado por la fiscal Stella Llorente contra la decisión del Tribunal de Apelaciones, que había revocado el procesamiento.

¿Qué piensa hacer ahora? ¿Por qué demandará al Estado? ¿Volverá a España? Hablamos sobre estos y otros temas con Héctor Amodio Pérez.

El juicio al Estado es un reclamo por la prisión indebida: ese es el inicio. Esa prisión indebida tuvo una serie de efectos colaterales, como que he tenido que vivir en condiciones precarias, en un país que ya no era el mío, sustentado por familia que tampoco estaba en una buena situación económica. Y voy a reclamar hasta la comisión que el Banco República me cobró por el dinero de la fianza que tuve que depositar para poder viajar.

Yo vine en el 2015 a presentar un libro con una situación legal absolutamente limpia. Mis delitos estaban prescriptos, amnistiados, etc. Yo venía a un país en el que gozaba de garantías legales, venía a un país democrático, pero me encontré con que no era así.

Estaba condenado a muerte por un hecho que no había cometido, por eso me vi obligado a adoptar otra identidad.

Estoy luchando para que quede claro que yo no realicé señalamientos. Voy a seguir trabajando para demostrar que esos señalamientos no se produjeron, no se demostraron.

El MLN no existe. Hubo un acuerdo a partir de 1972, donde el MLN es llevado a la debacle. Yo fui un opositor a esos planes.

No voy a decir a qué periodistas voy a demandar, porque en su momento se sabrá. Son varios. He sido tratado en determinados programas de una forma absolutamente desconsiderada, sin que se aportaran pruebas que certificaran sus palabras. Tengo derecho a reclamar por injurias y difamación.

Elegir al mayor traidor es muy difícil. A partir de julio de 1972, los dirigentes presos del MLN entran en una serie de negociaciones con las Fuerzas Armadas que terminan con la detención de Raúl Sendic. Está en los libros. Ferández Huidobro fue el gestor de un intento de golpe bueno. Los que trabajaban para tirar abajo las instituciones fueron los dirigentes del MLN, con Huidobro a la cabeza, no yo.

Yo colaboré con las Fuerzas Armadas: les ordené una documentación que ellos creían que era de vital importancia, que tenía que ver con evitar que las Fuerzas Armadas se mataran entre ellas. Soy el único que admite haber colaborado.

En cuanto pueda me vuelvo a España. Allá tengo mi vida encarrilada. Dejaré aquí cosas pendientes, que resolveré algunas por Internet y por otras tendré que venir. La historia recién empieza a conocerse.


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