En entrevista con Desayunos Informales, el atleta uruguayo repasó los 18 años de su carrera y habló del mal momento que le tocó vivir luego del resultado adverso de un dopaje.
Entrevista al deportista Andrés Silva en Desayunos Informales:
Los ocho meses de inactividad:
Estamos acá en este camino a Río, con muchas expectativas. En los primeros meses de suspensión hubo que solucionar todos los temas en curso, luego se llegó a los meses de pretemporada. Fue un momento difícil, no se lo deseo a ningún deportista. Llegar a una instancia donde me toma por sorpresa una negligencia... algo que uno no hace con intención, es muy difícil de sobrellevar. Pero tenía la tranquilidad de que nosotros estábamos haciendo todas las cosas bien. Siempre estuvimos limpios en todo aspecto, optamos por el fairplay.
El juicio de la gente:
A través de una red social todo el mundo es periodista hoy en día, frente a eso uno no tiene control. La opinión es de cada uno y está bien pero muchas veces detrás de esto hay un trabajo, una familia, un club. Fue muy dañino, la información se fue traspapelando. Había muchas versiones, era más fácil preguntar a una fuente confiable. Para mí fue muy fea la situación. Fue una bomba cuando salió. Pero cuando se resolvió mi tema no se habló de la misma forma. Pesó mucho más la primera parte, la mala. Pero son cosas del pasado, a partir de hoy eso ya no importa y uno intenta seguir con la experiencia, para que no me vuelva a pasar a mí ni a otros.
La meta: la final olímpica:
Soñar no tiene límites, he logrado todos los objetivos propuestos. Eso es lo importante en 18 años de carrera constante. Por qué no pensar en estar dentro de los ocho en una final olímpica.
El camino a Río:
Hasta el 11 de julio tenemos posibilidad de revisar la marca. En marzo vamos a estar en Brasil, en abril en Uruguay, en Chile y nuevamente en Brasil. Si hasta ahí no se realizó la marca, en mayo tenemos el Iberoamericano de Río. Y si todavía no se realizó la marca, bueno, viajaremos la marca. Voy a correr hasta que salga.
Dijiste que pensás en retirarte:
Sí, 18 años ininterrumpidos de carrera es mucho. Uno tiene un montón de expectativas, pero con todo lo que ha pasado no es el mejor momento para retirarme. Si llegué hasta acá ¿por qué no tirar un ciclo más?
El inicio de todo:
En el 98 con 12 años mis padres se fueron a Maldonado por razones de trabajo, yo iba al liceo al lado del Campus, hubo una preselección de chicos, me seleccionaron para atletismo con ocho chicos más y así fue que empecé.
Ser deportista de élite en Uruguay:
Algo fundamental es que las entradas a la pista son gratis, pero brindamos un espectáculo. Lo más importante de esto es que con todo lo que ha pasado y con todos los años de trayectoria, uno marca un perfil y eso permite que las empresas continúen apoyándome. Los primeros años hay que sacar del bolsillo de uno, si no saca el entrenador del bolsillo de él para el atleta. En mi caso hubo un poco de los dos, más del entrenador que de mi familia.
