Los vecinos de la zona no aguantan más los robos y se movilizaron para pedir más presencia policial.
Los vecinos de Juanicó sienten que se hacen oídos sordos a sus reclamos sobre robos, rapiñas, homicidios. En ese pueblo hay un solo policía para 4.000 habitantes que viven en Juanicó y sus alrededores. Cuando lo necesitan, no puede dejar solo el destacamento policial.
En Esta Boca es Mía contamos con varios testimonios. Uno de ellos fue el dueño del supermercado "La Kincaya". Esteban Montini relató que sobre las 21:00 entró una persona que amenazó a él y a la cajera a punta de revólver. Contó que fue un momento muy violento, donde el delincuente además de pedirles el dinero, los insultaba. "En lo único que pensaba era en que no me matara. Fue horrible", contó notoriamente conmocionado.
Otro de los comerciantes de Juanicó, Juan Capote, vivió una situación similar. Un hombre entró con casco a la carnicería que administra y dijo la clásica frase: "esto es un asalto". En ese momento había diez o doce clientes dentro del local. Una madre sostenía a su bebé pero se desmayó. Juan atinó a sostener al bebé, pero el ladrón le dijo que si se movía lo mataba. "Nos miramos a los ojos con el agresor. Había una señora, Carmen, que me agarró de la mano y me dijo que no lo mire. Se paró adelante mío y dijo: 'yo no tengo nada que perder, disparame a mí'", relató.
Azucena González es la madre de Pablo Porcal, quien fue asesinado el 2 de abril de este año. La señora cuenta entre lágrimas cómo fue el desenlace. Estaba sentada con su hijo tomando mate en el sillón cuando llegó una moto a la casa y desde afuera le pidieron una llave para ajustar la rueda. Azucena le pidió a Pablo que no saliera, pero él fue a buscar la herramienta. Volvió y le dijo a la madre que no le gustaba "la cara de estos tipos" y le mostró que salía armado. Desde la ventana ella vio como mataban a su hijo. Luego, los agresores entraron a su casa, la golpearon hasta quebrarla y destruyeron todo lo que encontraron. El arma con la que salió el hijo no la volvieron a encontrar.
Nos acompañaron tres vecinos de Juanicó que fueron testigos de hechos delictivos: Adelaida Porcal, Esteban Montini y Juan Capote.
