Los Vidal, una familia de boxeadores

Amilcar, de 21 años, estaba boxeando con un gran rumbo profesional, pero sufrió un accidente que lo dañó. Ahora se recuperó y va en busca de retomar el camino del éxito.

Amilcar Vidal nunca puso contra las cuerdas a sus hijos para que siguieran sus pasos.

“Nunca se los inculqué, como otros padres que quieren que los pibes jueguen al fútbol. Yo no. Los botijas lo hicieron por la de ellos. El que yo quería que boxeara era Richard”.

Richard hizo una larga carrera. Alejandro siguió sus pasos. Ahora el apellido es defendido por el menor de los tres hermanos, que lleva su mismo nombre.

“Tiene una combinación bárbara. Es guapo. El físico lo ayuda porque es grande. Es inteligente”.

Amilcar lleva 20 años en un gimnasio. Llevó más de 20 melladas sudamericanas y va por más. Pero su camino ha sido difícil, incluyendo un dramático accidente. Una camioneta lo atropelló cuando había salido a correr, lo que lo dejó con varias fracturas.


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