Hubo locales que no abrieron y otros no hicieron reparto a domicilio.
La cantidad de garrafas de supergás que se distribuyeron este jueves no fue suficiente para atender la alta demanda provocada por la actual ola de frío. Algunos centros de venta tuvieron sus puertas cerradas, y otros solo vendieron en el local sin reparto a domicilio. Las tiendas de Riogas, la empresa que protagonizó el conflicto que llevó a esta situación, estaban cerradas.
Por ejemplo, en el local de Propios y Cádiz se recibieron cerca de 400 garrafas, cuando la demanda en un día con estas temperaturas bajas es de 1.000. En algunas distribuidoras recibieron un par de camiones cargados con garrafas, pero se vendían rápidamente.
"La demanda es muy grande", explicó José Carlos Tonna, de Acodike Pocitos. "En dos tres días se soluciona el tema".
