El objetivo es seguir contribuyendo a la reducción del déficit fiscal.
El pedido está incluido en un documento que la Oficina de Planeamiento y Presupuesto y el Ministerio de Economía enviaron a las empresas.
Según comentaron fuentes oficiales al diario El Observador, en el caso de la UTE se pidió para el año que viene una baja del 2 % en los gastos gestionables, que incluyen por ejemplo los contratos con empresas tercerizadas o servicios de limpieza y vigilancia.
Se mantiene el ingreso de dos funcionarios cada tres vacantes y se pide una reducción del 10 % de las horas extras.
UTE deberá mejorar su resultado operativo en 40 millones de dólares y deberá volcar 70 millones de dólares a Rentas Generales: ya obtuvo ganancias por 200 millones en el primer trimestre de este año.
En Ancap, el Gobierno pidió para el 2018 un recorte general del gasto de 2 %. En algunas áreas la empresa estaría en condiciones de llevar esa reducción al 5 %.
En el caso de OSE también se pidió un recorte de gastos del 2 % en la partida para bienes y servicios, y una baja del 10 % de las horas extras.
Finalmente, se sugiere a todas las empresas que el gasto en publicidad sea solo de carácter institucional o comunicacional en las empresas monopólicas. En las que prestan servicios en competencia los gastos de publicidad del 2018 no podrán superar los del 2017. Se pide limitar las donaciones y no realizar planes de retiro incentivado.