El ministro del Interior lo atribuyó a que pensaban que el resultado electoral iba a ser otro.
El ministro Eduardo Bonomi dijo que nunca antes una campaña electoral debatió y cuestionó tanto una gestión en materia de seguridad y que eso motivó desobediencias en varios jerarcas. Bonomi sostuvo:
"Cuanto más cerca estuvo el acto electoral, cuanto más cerca estuvo el momento de las definiciones. Quizá llevados porque creían que el resultado electoral iba a ser otro, hubo algunos policías que no querían recibir órdenes y otros que demoraban el cumplimiento de las mismas porque quienes las impartían respondían a un gobierno que muy pronto iba a cambiar.
Eso fue una falta gravísima, en contra de la verticalidad del mando y del principio de autoridad. Nosotros vamos a seguir sin preguntar a quién votan para asignar responsabilidades, de eso pueden estar seguros. Pero no vamos a tolerar más conductas como las que mencionamos antes".
El ministro habló además de la continuidad en materia de políticas de seguridad:
"No va a haber novedades trascendentes el primero de marzo, las va a haber antes. Pues estamos en un proceso de cambio interno que fue reafirmado con el resultado electoral y después con los nombramientos hechos por el presidente electo Tabaré Vázquez".
El jefe de cartera dijo que las prioridades serán reestructurar las jefaturas de San José y Canelones como se hizo en Montevideo, reforzar la vigilancia aérea, enfatizar el combate a las rapiñas, a la pasta base y a los ajustes de cuentas y extender el plan Siete Zonas y la videovigilancia. También anunció que la Guardia Republicana trabajará en conjunto con Policía Caminera en la vigilancia de rutas.
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