La defensa del Gral. retirado Pedro Barneix así lo había afirmado cuando la Fiscalía pidió su procesamiento.
La Suprema Corte de Justicia resolvió que el caso de Aldo Perrini, detenido por la dictadura y asesinado en 1974 en Colonia, no prescribió como había sostenido la defensa de un militar acusado.
Perrini era un heladero votante frenteamplista que, de acuerdo con varios testimonios, un día intentó evitar que otras detenidas en el cuartel fueran violadas y eso le provocó torturas que culminaron en su muerte.
El Gral. (r) Pedro Barneix era en aquel entonces teniente primero y estaba de guardia ese día. Barneix reconoció ante la Justicia que estuvo presente durante los interrrogatorios, si bien aseguró no haber tenido responsabilidad en la muerte de Perrini. El militar, quien durante el primer gobierno de Tabaré Vázquez fue uno de los generales que realizó la investigación interna sobre los detenidos desaparecidos, es firmante del informe del deceso de Perrini. La Fiscalía había pedido su procesamiento con prisión.
La decisión de la Suprema Corte tiene que ver con que durante la vigencia de la Ley de Caducidad no se pudo trabajar en la causa, por lo que no puede haber prescrito.
