El ente veía viabilidad en el caso de que pudieran negociar excedentes energéticos con Argentina.
Autoridades de UTE fueron a la comisión parlamentaria que investiga posibles irregularidades en la planta regasificadora. Allí informaron qué evaluación hicieron del negocio.
“Apoyamos el contrato que finalmente se votó. Era una condición para tomar la decisión que hubiera cierto nivel de negocio con Argentina”, explicó Gonzalo Casaravilla, presidente de UTE.
El diputado nacionalista Pablo Abdala dijo que el negocio sin Argentina es inviable.
“En mayo de 2013 cuando se adjudicó la obra, para la UTE los números estaban muy ajustados. Está dicho en la resolución que dio la licitación a GNLS y OAS. Según los técnicos de UTE, si no era colocando los excedentes de la región en la Argentina, la regasificadora era inviable. Hay una diferencia de criterio entre Ramón Méndez y lo que sostuvo Casaravilla”, opinó Abdala, quien también consideró que el proceso fue hecho en forma apresurada.
El Gobierno espera definir el tema en estos días en función de la situación de Argentina.
