El Maestro Tabárez contó que entre los internos está Jorge García, que pasó por las selecciones juveniles y jugó en Danubio y Cerro, entre otros equipos.
La sala 12 del Hospital Vilardebó está compuesta por los enfermos psiquiátricos inimputables. Entre ellos está Jorge García, un futbolista que pasó por las selecciones juveniles y jugó en Danubio y Cerro -entre otros equipos-. Tabárez, a pedido, fue a verlo con su ayudante, Celso Otero. Tras el encuentro, los pacientes le regalaron un banco con la bandera de Uruguay hecho con tapitas. Es similar al que le regalaron al expresidente José Mujica.
“Muchos de esos internos no pueden salir. El caso de Jorge [García] es ese. Por eso hubo que traer el banco y ponerlo ahí. Quizás como prueba de que hay otras cosas además del fútbol y la selección. Y cómo a veces el fútbol puede motivar para tratar de que la vida de esa persona siga, con los controles que haya que tener, pero no abandonándolos a su suerte ni a su posible empeoramiento, sino dándole armas para que tengan una vida lo más digna posible”.
