Silvinei Vasques, exdirector de la policía de carreteras (PRF), fue condenado el 16 de diciembre por la Tribunal Supremo a 24 años y seis meses de prisión.
Un exjefe de la Policía Rodoviaria de Brasil, que había huido del país tras ser condenado por el intento de golpe de Estado que encabezó el expresidente Jair Bolsonaro, fue arrestado la madrugada de este viernes en Paraguay.
Silvinei Vasques, exdirector de la policía de carreteras (PRF), fue condenado el 16 de diciembre por la Tribunal Supremo a 24 años y seis meses de prisión por su complicidad en la intentona golpista de Bolsonaro contra el actual presidente, Luiz Inácio Lula da Silva.
Vasques cumplía su pena en casa en el estado de Santa Catarina y estaba autorizado a salir de su casa durante el día usando una tobillera electrónica. Ante la frustrada fuga, el juez de la Corte Suprema Alexandre de Moraes ordenó este viernes la "prisión preventiva" del exfuncionario.
Según la prensa brasileña, Vasques, de 50 años, rompió la tobillera y cruzó en auto la frontera con Paraguay. La Policía Federal detectó el jueves "ausencia de señal GPS" en el aparato, según un documento judicial.
Una fuente de la Policía Federal, en condición de anonimato, informó a AFP de la captura en un aeropuerto. Los reportes de la prensa brasileña indicaron que la detención ocurrió en el aeropuerto internacional Silvio Pettirossi, próximo a Asunción, cuando intentaba abordar un vuelo con destino a El Salvador con documentación falsa y agregaron que las autoridades habían emitido avisos a Paraguay y otros países vecinos como Colombia y Argentina.
Jair Bolsonaro fue operado "con éxito" de una hernia inguinal este jueves
Según la decisión de Moraes, investigaciones de policía determinaron que Vasques abandonó su domicilio la noche del miércoles en un auto registrado a nombre de una compañía de alquiler de vehículos y que se había llevado a su perro pitbull.
La Corte Suprema condenó a Bolsonaro junto a otros excolaboradores, entre ellos Vasques, por conspirar para mantenerse en el poder tras perder las elecciones de octubre de 2022 con Lula. El exmandatario fue sentenciado a 27 años de prisión.
Bolsonaro, de 70 años, estuvo varios meses en prisión domiciliaria. A finales de noviembre fue encarcelado en las dependencias de la Policía Federal en Brasilia luego de intentar quemar su tobillera electrónica con un soldador.
El expresidente salió de prisión por primera vez el miércoles para internarse en el hospital DF Star de la capital brasileña, donde fue operado el jueves de una hernia inguinal. Se prevé que permanezca hospitalizado entre cinco y siete días más. Aquella trama golpista fracasó por falta de apoyo de altos mandos militares. Bolsonaro continúa diciendo que es inocente y agrega que es "perseguido" por la Corte Suprema.
Otro de los exfuncionarios judicializados por este caso es el exjefe de inteligencia Alexandre Ramagem, prófugo en Estados Unidos.
Con información de AFP

