El ministro de Salud consideró que “hay que seguir disminuyendo la prevalencia del consumo de tabaco” y que “la población tiene que sentir que eso es razonable”.
Cada año mueren 40 millones de personas en el mundo por enfermedades no trasmisibles. Representan 7 de cada 10 muertes, destacándose cáncer, obesidad, diabetes, afecciones cardiovasculares y respiratorias.
¿Cuál es la realidad uruguaya? ¿Cuántas personas mueren por año en el país por estas enfermedades? ¿Cuál es la que más afecta a nuestra población?
Abordamos el tema junto al ministro de Salud Pública, Jorge Basso.
Enfermedades no transmisibles
Tenemos cuatro grandes patologías, todas vinculadas a los mismos factores de riesgo: enfermedades cardiovasculares, las oncológicas, las respiratorias y las metabólicas (en particular, la diabetes). Esto viene acompañado al crecimiento económico: las sociedades mejoran, aumenta el consumo, y ese consumo se centra en un conjunto de factores de riesgo y hábitos como falta de actividad física. El mundo se viene desarrollando y viene arrastrando una piedra consigo mismo.
A medida que se prolonga la vida, aumenta el peso de las enfermedades crónicas: que no se curan y que implican gastos. Seguramente tienen más marketing los medicamentos o los sistemas, pero hay hábitos que se pueden cambiar.
Este tipo de enfermedades empezó a ser originalmente de los países desarrollados, porque eran los que consumían más. Pero ahora la población más vulnerable es también la más vulnerable a estas enfermedades.
Hay que seguir disminuyendo la prevalencia del consumo de tabaco. La idea es que se sigan aplicando estrictamente las medidas, que pasan por el famoso etiquetado plano.
La población tiene que sentir que esto es razonable, que los ayuda a ellos y a su contexto. Nosotros inspeccionamos y multamos, pero no se resuelve con un ejército de gente inspeccionando.
Haber bajado del 25 % al 9 % la prevalencia de fumadores jóvenes… eso es bueno, porque retrasan el inicio o directamente no serán consumidores de tabaco.
Ha habido un aumento exponencial en el consumo de alimentos con altas concentraciones de grasas, azúcares, sal. La población no identifica que ese alimento tiene esas características. El uruguayo medio consume 150 kilos de alimentos ultraprocesados con altos contenidos de grasas por año.
Esto no se soluciona solamente con el etiquetado de alimentos, sino generando un profundo cambio cultural desde la niñez. Pero también con información: y la persona tiene que lograr interpretar rápidamente lo que aparece en el envase. Algo tenemos que hacer. Estamos discutiendo cómo hacerla.
La venta de marihuana medicinal
Aquellos productos que tienen baja psicoactividad no requieren una receta especial, porque no sin psicofármacos. Estamos tratando de que ese médico que la indica tenga posibilidades de poder acceder eso, y que esos productos estén en nuestro país.
Esperemos anunciar en los próximos meses que esa actividad se puede formalizar en nuestro país.
