Bonomi: "No trabajo para lograr una sensación de que los delitos bajaron, sino para bajarlos efectivamente" - Teledoce.com
Bonomi: "No trabajo para lograr una sensación de que los delitos bajaron, sino para bajarlos"

Bonomi: "No trabajo para lograr una sensación de que los delitos bajaron, sino para bajarlos efectivamente"

Bonomi: "No trabajo para lograr una sensación de que los delitos bajaron, sino para bajarlos"

El ministro del Interior consideró que la percepción sobre la mejora en la seguridad “está dividida”. Además, afirmó que el caso Sendic encierra una “situación humanamente difícil”.

Asumió como ministro del Interior en marzo de 2010, en el inicio del Gobierno de José Mujica, y ya van siete años y medio en el cargo. Hace unos días anunció que en el primer semestre de 2017 las rapiñas cayeron 10,6 %, los homicidios 7,1 % y los hurtos 3,6 % en relación al mismo período de 2016. ¿Cómo hará para cumplir la promesa de reducir un 30 % las rapiñas al final de este período?

Abordamos estos y otros temas junto al ministro Eduardo Bonomi.

Baja en rapiñas y homicidios

Nunca me manejé con el concepto de sensación térmica. Si existe la sensación de inseguridad, el Gobierno tiene que intervenir. La frase era de Juan Andrés Ramírez, después quedó bajo tierra y apareció de nuevo al principio del Gobierno del Frente Amplio.

Los delitos ya bajaron el año pasado, y ahora están bajando otra vez. La gente todavía no lo registra.  Ahora estamos por debajo del nivel de 2013, en rapiñas. En homicidios todavía faltan registros del año cerrado.

El 30 % en la baja será midiéndolo desde el último año de Gobierno, porque hay que tomar medidas que requieren presupuesto, y eso empieza a funcionar el 1º de enero de 2016. Estamos en el 12,7 %, por lo que se puede llegar al 15 %. Después hay que mantenerlo.

Creo que aún cumpliendo estrictamente con el 30 %, quedamos por arriba del 2010. Tiene que ser una baja mayor al 30 % para bajar lo del 2010.

Hoy la percepción está dividida. La baja se siente más en los lugares donde está el PADO, que es en los lugares donde había mayor inseguridad.

Vamos a tomar medidas que van a impactar en la zona de avenida Italia y 8 de Octubre hacia el sur, donde hay menor percepción de la baja.

Situación carcelaria

Es cierto que se necesitan las políticas sociales, pero van a dar una salida de fondo en el mediano plazo. Pero mientras tanto, son imprescindibles las medidas policiales.

Cuando empezamos a aplicar el PADO y otras medidas nos fuimos de 10.000 a 11.300 en la cantidad de presos. Ahí aumentó rápidamente la población carcelaria.

Cámaras de vigilancia

Desde el 15 de octubre se van a instalar cámaras todos los días, hasta completar las 3.300. Vamos a llegar a más de 6.000 cámaras, contando las que ya hay. También hemos cambiado el sistema de educación policial.

La actuación policial

Asistimos a un período de tiempo largo en el que la denuncia se dificultaba. Hubo una época en la que la forma de bajar los delitos fue dificultar la denuncia. Nosotros hemos tratado de que eso no sea así, sino todo lo contrario. Hemos puesto la denuncia en línea y las tablets que lleva el PADO.

Además, le dimos ingreso a becarios universitarios que se encargan de tomar la denuncia y que la Policía se dedique a salir a la calle.

El Plenario del 9 de setiembre del Frente Amplio: caso Sendic

No sé qué va a pasar. No estoy yendo al Frente Amplio. En el Consejo de Ministros me siento al lado de Sendic. No hemos hablado mucho del tema. Es un tema en el que existe expectativa de que el Plenario resuelva, pero no puede resolver respecto a la vicepresidencia.

Pienso que una persona que está viviendo una situación de estas… es difícil. Todo el mundo toma la cuestión como un hecho político, pero poco se fijan en el aspecto humano de la cosa. Si yo voy a la Comisión de Ética y se me cuestiona… no sé si seguiría. Una cosa es la crítica desde la oposición, pero otra es la que viene desde la misma fuerza política, que es como una falta de respaldo. Es una situación humanamente difícil.

¿Sigue en el cargo?

No trabajo para lograr una sensación de que las cosas bajaron, sino para bajarlos efectivamente. Nos llevó cinco años para transformar la Policía. Ahora llega el momento de recoger lo que se sembró, y eso tiene que traducirse en una baja de delitos. E hicimos un compromiso: el 30 %.

Me siento comprometido con eso. Me podría ir si hubiera cumplido. Está encausado, pero todavía no alcanza.


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