El senador del Frente Amplio reconoció que el tratado de libre comercio con China es una buena oportunidad, pero sin desatender las cuestiones del Mercosur. Además, afirmó que, en política internacional, este gobierno ha hecho "cualquier cosa".
Daniel Caggiani - senador del Frente Amplio
Fuimos con mucha expectativa, y nos fuimos con mucho más dudas. Nos fuimos con gusto a poco porque pudimos conocer de primera mano alguna información sobre los resultados del estudio, no sobre el estudio en sí porque este tipo de negaciones tienen grado de confidencialidad, porque no se puede negociar en la tribuna.
Se había citado al canciller a una comisión del senado, y nos esperábamos que por los mecanismo del parlamento, se pudiera conocer cuales son los escenarios que se manejan y cuales son los resultados de un posible TLC con China, que es un socio comercial clave en comercio de bienes, la segunda economía del mundo, es importante conocer adecuadamente los sectores que se beneficiarían y cuales tienen pérdidas de competitividad.
Hay cierto rasgo que el ministerio tiene que guardar, pero hay marcos políticos para avanzar en acercamiento. Teniendo en cuenta que lo que se terminó es un estudio de factibilidad. Recién en estamos en los primero pasos, queríamos ver los valores, y sobre todo en que se puede ayudar. El parlamento nacional va a ser quien lo va a rectificar.
No hay negativa, nosotros fuimos promotores de un acercamiento comercial con China.
Una cosa es el instrumento, y otra el contenido, y otra el cómo se llega a ese acuerdo. Nosotros como oposición queremos ayudar al gobierno, este gobierno tiene problema de autoestima y se deja ayudar poco. Nosotros le planteamos al canciller que haya equipos técnicos de los partidos siguiendo el acuerdo. Queremos que se pueda abrir con China sin cerrar otras como en el caso del Mercosur. Lo que tiene que lograr el gobierno es abrir algunas puertas sin cerrar otras. En este presente y en un futuro, Uruguay tiene la presidencia pro tempore del Mercosur. Un gran objetivo sería lograr la flexibilización, pero con el aval del bloque.
Una cosa que estemos de acuerdo con el acuerdo, y otra cosa es cómo se llegue. Hay que tener acumulación positiva de la relación con China. Pero también cómo llegamos a un acuerdo económico dice mucho. China es nuestro primer socio comercial en bienes, pero el Mercosur nuestro primer socio comercial en lo bienes, servicios e inversión extranjera. Si uno toma todos estos aspectos, el Mercosur es nuestro principal socio comercial. Pelearnos con el Mercosur para avanzar con un TLC con China es un sinsentido.
Nadie espera nada, y nadie lo puede hacer en solitario. El problema es que si vos te llevas mal con tus socios regionales, tus vecinos, vasa tener problemas de otra índole. Siempre es mas fácil decirlo que hacerlo, lo importante del gobierno hoy es tratar de hacerlo de la mejor manera porque si no lo hace de la mejor manera puede tener consecuencias, y capaz el remedio es peor que la enfermedad. Y teniendo en cuenta en el mundo en el que estamos; estamos en un mundo de mayor incertidumbre. El mundo no esta para grandes aventuras, lo que ya tenés seguro mantenerlo, y después ir dando pasos seguros para tener otro tipo de preferencias, pero sin perder lo que ya tenés.
Hay cosas que son estáticas, o podés tener un estudio más dinámico. Eso es parte de lo que le pedíamos al gobierno. Siempre cuando uno hace acuerdos comerciales hay otros elementos que se van encadenando (comercio de servicios, la inversión, etc.), eso es parte de la ecuación hay que ver.
Nosotros en el 2016 hicimos un estudio de factibilidad como gobierno, que tenía tres escenarios, después China no quiso avanzar. Por un lado, si vos avanzabas como bloque regional en conjunto, en términos económicos te daba un buen resultado. Después si avanzabas como país individual pero con anuencia del bloque también daba un buen resultado porque mantenía las dos preferencias. Ahora, si lo hacías solo, la cuenta país daba menos.
Sin duda el Mercosur tiene luces y sombras, pero da trabajo al Uruguay. Miremos el sector turístico y logístico. Y eso, en un mundo de incertidumbre, es mejor mantenerlo, y mejorarlo si es posible. No estamos en momento de dar salto en un trampolín y saltar a una piscina que no sabemos si tenemos agua. Hoy la pelota esta en la cancha del gobierno para lograr la flexibilización en el bloque.
Una es la política internacional, y otra la política de inserción comercial. En esto último, yo creo que el Uruguay ahí está teniendo un rumbo país. Ahora, en el tema internacional, yo creo que este gobierno es de las peores áreas que tiene. Para empezar, cambiamos el canciller a los tres meses. Lo hicieron renunciar cuando arrancó la cumbre del Mercosur, y terminamos con otro. Fuimos a Reino Unido a pedir un acuerdo comerciales y ahora Boris está en la cuerda floja. Hemos hecho cualquier cosa. Nos confiamos en la administración Trump. Ayer le preguntamos al canciller cuándo iban a comenzar las negociaciones con China, respondió que no sabía. No le preguntamos cuando iba a terminar.
El Uruguay tiene que tener relaciones comerciales con todos los países. Después están las relaciones políticas y diplomáticas. Lo político y lo comercial van por separado. Medir la inserción comercial en cuantos acuerdos se firman, es una fonema. El Frente Amplio firmó algunos acuerdos; este gobierno en tres años no firmó ningún convenio.
Hay otro tema que confunden instrumentos y fines: la apertura es buena en función a una estrategia que vos tengas. Para Uruguay hay ciertos sectores que es bueno ser aperturista, pero para otros no, que hay que protegerlo (el lácteo). Hay que tener equilibrio, no hay máxima.
El Mercosur tiene una especie de muerte cerebral, de pensarse estratégicamente. El cambio de gobierno de Brasil puede lograr una visión estratégica del bloque y de la región. Hoy Brasil es un hueco. Para el Mercosur es importante que haya un cambio de gobierno. y que el Mercosur se pueda pensar de una forma más moderna, más flexible, y más integrado al mundo. Siempre que le vaya bien a Argentina y Brasil, a Uruguay le va bien a nosotros.
La situación actual político y económica de Argentina
¿Por qué argentina está tan mal hoy? Porque está lleno de argentinos (risas). La situación de Argentina es compleja porque es un país muy complejo desde el punto de vista de su estructura política. Hay intereses muy complejos. Nosotros somos dos países hermanados pero tenemos diferencias, y está bueno mantenerlas, en cultura política. A veces se "argetiniza" mucho la política uruguaya.
Lo importante es que Argentina se encauce en la economía y también en lo político, y eso va a generar tranquilidad social. Acá dicen "no es economista" (Sergio Massa). No quiero hacer paralelismos, pero cuando en la peor crisis uruguaya asumió un abogado. Es importante eso porque a vcees es tiempo de la política, no tanto de la técnica. No digo que esa sea la solución porque en Argentina es más complejo.
