"Buscamos que haya más caras de personas y no tanto órganos afectados", se explicó.
En los próximos días comienza a regir en Uruguay una nueva normativa para las cajillas de cigarros. Abordamos el tema junto a Enrique Soto, director del Programa Nacional para el Control de Tabaco del MSP.
Uruguay lleva mucho tiempo transitando este camino y se acentuó en la Presidencia de Vázquez. Hemos transitado todos los puntos que están en el convenio marco para el control del tabaco, que en Uruguay es ley.
El artículo 11 está relacionado al empaquetado y etiquetado. Y el 13 con la publicidad. Todo eso para ir hacia el empaquetado neutro como forma de desestimular la atractividad del producto. El nombre del producto y la marcan persisten, pero se establece cómo debe estar presentado.
El desestímulo es producto de varias acciones y todas han sido estudiadas. Apuntamos a convencer y a concientizar, a que la persona esté informada y decida.
Casi 400.000 uruguayos han dejado de fumar, pero todavía quedan un poco más de 500.000.
Esta será la novena ronda de pictogramas que se aplicarán. Las figuras están relacionadas en base a los datos de prevalencia. Ha descendido la prevalencia tanto en hombre como en mujeres, pero la pendiente de descenso es mayor en el hombre que en la mujer.
Buscamos que haya más caras de personas y no tanto órganos afectados. Las imágenes son distintas en una cara y en otra, son juegos de imágenes. Una se vincula al aspecto externo de las personas y otra a alguna patología desencadenada por fumar.
