El presidente de la Cámara de Construcción habló sobre el balance del año en el sector, los datos publicados por el Banco Central y el proyecto de inversión pública presentado al gobierno, para estimular la economía y reactivar fuentes de trabajo.
Balance
Hicimos un acuerdo de licencia especial de 8 días hábiles sobre finales de marzo y luego se enganchó con la licencia de Semana Santa, reglamentaria de la construcción y volvimos el 13 de abril y desde allí hemos estado trabajado desde forma ininterrumpida y eso es algo muy positivo que nos deja muy conformes en el balance del año es lo que más destacamos. Se mantuvo la fuente de trabajo para cerca de 45 mil trabajadores directos de obra y lo que están alrededor de ellas.
Tuvimos casos de covid prácticamente hasta noviembre, 4 o 5 casos aislados de algún trabajador, en las últimas semanas hubo algunos casos más en línea con lo que está pasando a nivel país, pero no tuvimos un brote en alguna obra y que haya desbordado, sino más bien casos particulares, contagios fuera de la obra y que no tuvieron incidencia en el sector. Desde ese punto de vista el balance del año fue muy positivo. Si miramos números de actividad que publicó el Banco Central, son sentimientos distintos, pero nos quedamos con lo primero.
Banco Central
El Banco Central acaba de publicar los datos del tercer trimestre y tenemos una cada importante con respecto al tercer trimestre del año pasado, casi del 8% así que cuando tengamos los números del 2020 en realidad vamos a cerrar el año con una caída bastante importante.
Perspectivas de la Cámara
Siempre marcamos que tiene tres pilares, una es la inversión privada en vivienda, que ahí hay una expectativa importante de buen desempeño porque hubo medidas de administración que fueron muy positiva. Hay una serie de estímulos fiscales para la inversión en vivienda que está teniendo buena repercusión y habrá impulso en ese sector. El otro pilar es la inversión privada dentro del ámbito productivo y comercial y esperamos que a pesar de la pandemia puedan haber otras inversiones. El tercer pilar es la inversión pública, más o menos representa un tercio de la construcción, es la que se siente más resentida debido a dificultades fiscales como la Ley de Presupuesto, que es muy austera y ajustada a esas restricciones y eso tendrá un impacto importante. En la globalidad pensamos que el 2021 va ser de crecimiento con respecto al 2020. En medida que no haya un mayor impulso en la inversión pública e inversión infraestructura será una dificultad importante para el crecimiento del sector.
La inversión privada en vivienda, es el sector de la construcción que será dinámico en el 2021, quizá la incertidumbre está más que nada por el lado de la demanda, pero sin duda que el sector de vivienda y de inversión inmobiliaria será un sector muy dinámico.
Inversión pública y privada
Inversión pública en los últimos 10 años ha representado un tercio de la inversión total. La inversión privada en el sector inmobiliario se concentra en la costa, el 95% de las viviendas promovidas durante los últimos años se han hecho en Montevideo, Maldonado y Canelones, eso es muy importante, pero no da ramas de actividades por toda la república, por eso la inversión pública tiene esa virtud en cuanto a su ubicación en el territorio y genera trabajo en todo el país.
Proyecto de inversión pública
Entendemos perfectamente las restricciones fiscales que tiene el país y la ley de presupuesto, pero también pensamos que es necesario generar recursos extra presupuestales o financiamiento extra presupuestal para invertir en las diferentes estructuras. Hemos hecho una propuesta, nosotros lo llamamos fondo coronavirus porque entendemos que hay una necesidad para reactivar la economía y reactivar el empleo y está en estudio de las autoridades, pero debido a las demandas de la pandemia se retomarán las conversaciones durante los primeros días del año que bien.
Lo que nosotros proponemos, lo que llamamos fondo coronavirus es buscar una forma de financiamiento a largo plazo indudablemente un endeudamiento a largo plazo del Estado, pero que hay mecanismo para que eso no se compute como una deuda completa, sino que se vaya yendo a lo largo cuando se vaya pagando durante el tiempo.
