El Sindicato de la Aguja elabora muñecos para el Día del Niño: "Que tengan un juguete hecho con cariño y amor que represente a lo que aspiramos"

Flor de Liz Feijoo, integrante del sindicato, valoró la cantidad de donaciones que se acercaron y las personas que se sumaron.

El Sindicato de la Aguja comenzó a elaborar muñecas y muñecos de trapo que representan distintos oficios para regalar el Día del Niño y concientizar sobre la violencia de género. Esto permitió además ocupar a muchas trabajadoras que se habían quedado sin ingresos.

Esta idea surge desde la Comisión de la Mujer del Sindicato de la Aguja. No solo participaron las mujeres, sino los vecinos. Surge de una manera de cómo lidiar con esta situación de aumento de ollas populares y falta de trabajo. Nos pareció que, más allá de un plato de comida, que los niños tengan un juguete hecho con cariño y amor que represente a lo que aspiramos para nuestros niños. Que los niños y niñas sepan jugar con muñecos, porque el día de mañana serán papás y mamás, para no replicar esos roles.

Es importante para nosotros el tema de trabajo. Como sindicato nos preocupa el desarrollo productivo, que los niños entiendan los oficios y los respeten.
Los materiales los estamos obteniendo de las donaciones que nos dan. Es una alegría para nosotros haber recibido una donación de una máquina de tjer de una señora que se ofrece enseñar a tejer a las compañeras. Es sumamente lindo que se acerque la gente. Es importante que se acerquen a esto que es súper lindo y solidario.

Tenemos el objetivo de 300 muñecos para el Día del Niño. Se hacen en ciudad de Salto y el departamento de Artigas y nos llegarán. Estamos en la Intersocial Centro del PIT-CNT. Hay muñecos que irían para merenderos y para la Casa de Cultura Afro. Esto empezó para el Día del Niño, pero seguiremos haciendo muñecos porque es linda esta construcción colectiva.

Lamentablemente, ante una crisis global, los que más pagan el precio son mujeres y niños. Las trabajadoras no están exentas. Nos olvidamos de aquellas que están en su casa tejiendo y haciendo artesanías. La trabajadora a domicilio fue la que cubre necesidades básicas. Fue importante lo que pudimos generar con más de 60 compañeras de forma solidaria, pero empezaron a aparecer pedidos de empresas. Es importante la regularización.


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