IM comienza fiscalización del uso de sal en locales gastronómicos: primera etapa se basará en "la propuesta a la vista" y luego se saldrá con salinómetros

"Saldrán nutricionistas con una doble finalidad: fiscalizar e ir instruyendo a quienes elaboraron la comida", explicó la directora de Salud de la comuna capitalina.

Hace cuatro años (en 2014), la Intendencia de Montevideo prohibió los saleros en las mesas de bares y restaurantes. Ahora entra en vigencia un decreto de la Junta Departamental, aprobado en abril pasado, que establece que el 10 % de los platos de los restaurantes no deben tener sal agregada.

Tras ser aprobada la reglamentación, esta semana comenzarán los controles en dos etapas. Abordamos el tema junto a Analice Berón, directora de Salud de la Intendencia de Montevideo.

La fiscalización comienza a partir de este martes 16. Nosotros habíamos dicho que empezaba en la segunda quincena de octubre, así que estamos dentro de lo planificado.

Tiene que existir un 10 % de estos platos sin sal agregada en la carta del local o en la forma que tenga el lugar de promocionar sus productos. Tiene que estar visible, tanto para los consumidores como para los inspectores.

Cuando un alimento se elabora siempre se le ponen condimentos, entre ellos sal. Nosotros tenemos que hacer cumplir la no existencia de sal agregada. El sodio que ya tienen los ingredientes no se contabiliza, pero sí el agregado de sal en la elaboración.

Todo el cuerpo de inspectores estará habilitado para hacer esto, de la misma manera que debe sancionar si hay saleros arriba de las mesas. Hemos hablado con Cambadu, porque es cierto que ha venido aumentando la presencia de saleros en las mesas.

Saldrán nutricionistas con una doble finalidad: fiscalizar e ir instruyendo a quienes elaboraron la comida para conversar sobre las preparaciones sin sal. La multa será de 5 UR y luego irá aumentando de acuerdo a lo que suceda.

Nosotros nos plegamos a las políticas nacionales de prevención de las enfermedades no transmisibles.

En esta primera etapa se va a fiscalizar la presencia del 10 % en las cartas, lo que implicará una primera exploración en el mercado. En la segunda etapa, para lo que no se fijó fecha, se saldrá a fiscalizar con un salinómetro, que mide la cantidad de sal que tiene un preparado. Se medirá en base al plato original.


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