Casi uno de cada cuatro uruguayos pasó hambre entre 2019 y 2021. Esto según un informe de la Organización de Naciones Unidades para la Alimentación y la Agricultura (FAO), que reveló que el 23% de la población estuvo en situación de inseguridad alimentaria moderada o grave en esos años. La cifra creció poco más de un punto porcentual con respecto a la medición anterior. No obstante, el registro de Uruguay es el segundo mejor de Sudamérica, solo superado por Chile.
Hambre en Uruguay
Cuando se habla de hambre es diferente. Nosotros medimos inseguridad alimentaria, en donde no puede completar toda su alimentación en calidad. Hablar de hambre es mucho más grave. La inseguridad alimentaria se mide desde 2014. Tenemos números de desperdicio de alimentos que son brutales.
Uruguay desde la primera medición tenía 21,6%. Siempre estuvimos por arriba del 20%. El pico fue en 25%. La última medición dio 23%. Son números dolorosos porque es la situación de nuestros compatriotas. En pandemia fuimos la región que mejor accionamos. Las ollas cumplieron una función en donde el sistema de protección era más débil.
Hambre es una sensación. La persona que tiene inseguridad alimentaria grave puede pasar hambre por momentos. Hicimos la encuesta FIES que es la misma que utiliza la FAO. De la encuesta de agosto ya tenemos los datos. El 4 y 5 de octubre viene un especialista de FAO y tenemos mucha expectativa en esos números. El universo que se encuesta es mucho mayor. Esto se resuelve entre todo el país.
El FA votó contra los dos artículos del INDA. Vamos a iniciar el programa este año pero todos los procesos de compra y contratación de recursos humanos llevan un tiempo. La alimentación de este año va a ser nueve veces. El programa tiene tres fases. La primera sacarle la carga a las ollas de esa asistencia que está dando. La segunda, buscar mecanismos de salida.
Gestión de la problemática
La gente tiene que tener la libertad de elegir lo que come. Lo que aspiramos es a eso. El gobierno tiene que buscar diferentes salidas para que esto se pueda solucionar. Sin duda estoy en el puesto de bombero. Estamos en el día a día. Es difícil salir rápidamente de esa salida. Esto no se sale solo con los comedores o la ayuda del INIA.
Es una ayuda, una forma de que la gente no pase hambre. En marzo va salir una respuesta rotunda para asegurarle un plato de comida, pero va a seguir teniendo inseguridad alimentaria. Vamos a hacer un índice de inseguridad alimentaria grave o moderada. Para llevar la inseguridad alimentaria a 0 hay que darle 4 platos de comida y que la gente pueda elegir.
Tenemos más o menos mapeado los lugares en donde hay más cantidad de ollas. Vamos a abrir dos comedores. Luego vamos a tener puntos de distribución móviles. La idea es distribuir comida que la gente se pueda llevar para su casa. En Montevideo tenemos cuatro comedores y los puntos móviles los vamos a ver con los alcaldes. Pensamos tener dos móviles y en cada uno tener tres o cuatro lugares. Con el acalde del municipio F ya estamos en contacto.
Las ollas llevan un registro que nosotros no tenemos acceso. Hoy aceptamos en el sistema 4000. En el sistema no van más de 1200 en Montevideo.
Situación de la coordinadora de ollas
No me gusta hablar de rehenes. Es de orden que se rinda cuentas. Es básico. Es una red de ollas que no quiere dar datos. Es lo básico que se le pide a la red de ollas. No sé por qué no lo quieren dar. Estamos en un cargo político y la plata es de todos los uruguayos.
Uruguay Adelante
La idea es que deje de funcionar en marzo. Fue coyuntural, fue una decisión de las ollas. La adjudicación de los recursos es hasta marzo.
