"Hay endeudamientos y quiebra de empresas, y no solo del sector agropecuario", afirmó Gerardo García Pintos.
¿Qué opina la Asociación Rural del Uruguay (ARU) sobre los anuncios del Gobierno para el sector agropecuario? ¿Coinciden con el resto de las gremiales en que son insuficientes?
Abordamos el tema junto a Gerardo García Pintos, vicepresidente de la ARU.
Estuvo bueno que nos recibieran representantes de todo el Gobierno: el presidente, la vicepresidenta y los ministros de Ganadería, Industria, Economía y OPP, además de la presidenta del Instituto de Colonización.
Las gremiales pedimos la entrevista en los primeros días de diciembre. Hubo un manejo que no estuvo bueno y que calentó a la gente, sumado a que las dificultades son enormes y reales. El presidente –probablemente– preside el país más agroexportador del mundo, por eso es tan importante el tipo de cambio, sobre todo en una economía del agro totalmente dolarizada.
Hay endeudamientos y quiebra de empresas, y no solo del sector agropecuario. Todo esto rompe los ojos, es real. El sector agropecuario derrama por sobre el resto de la economía. El interior está mucho más afectado que Montevideo.
Cuando vimos que el presidente iba a plantear sus medidas, le hicimos cuatro planteos: el tipo de cambio, que está asociado al achique de costos y del déficit fiscal; el tema de los combustibles a nivel global; la energía eléctrica; y la mochila diez de Blasina en Durazno, que es el tema de los prejuicios y los ataques hacia el campo. Vázquez coincidió en hacer un esfuerzo conjunto para bajar la pelota y mantener el buen clima.
Ahora estamos invitados a una mesa de trabajo, a la que se está evaluando ir. Nosotros estamos priorizado seguir trabajando con las seis gremiales y con el movimiento Un Solo Uruguay –autoconvocados–.
Está bueno que el Uruguay entienda que los recursos públicos no son ilimitados. Y también para hablar sobre qué pasa en el campo, con la gente del campo, que está tan globalizada como los del no-campo.
