En el 2020 se registraron 410 denuncias de explotación sexual comercial de niñas, niños y adolescentes. Hubo 170 casos más que en 2019 y tanto el aumento como la pandemia se explica “una depreciación” de la presencia del Estado, según informó y comentó el director del Comité Nacional para la Erradicación de la Explotación Sexual de la Niñez y la Adolescencia (Conapees).
Informe
Es una puesta a punto de identificación que hacemos a lo largo y ancho del país sobre situaciones de explotación sexual comercial o de presunción de explotación sexual comercial. Estos números dan una incrementación tendencial que lleva 10 años en el país y es una de las tres formas de violencias que sufren nuestros niños y niñas del país. Hace 10 años que viene creciendo la cifra, con una baja en el año pasado, que hipotetizamos que se debió a un cambio de escenario del mundo real al mundo virtual. Si bien hay aspectos culturales que invisibilizan o naturalian el fenómeno, el corrimiento hacia formas de encuentros vinculadas a las plataformas y las aplicaciones sacaron de la vista de los espacios de cuidado e identificación de estas primeras relaciones y encuentros que antes se daban en la calle.
Depreciación de la presencia del Estado
Es un término que acuñe en una entrevista y tal vez no fue el más feliz, pero de alguna manera lo que sucedió es que en los primeros meses de este año debido al producto de la pandemia hubo un retiro de los distintos espacios de cuidados de niños, niñas y adolescentes. Esto se expresó en los centros de INAU, en sistemas de guardias, las policlínicas funcionaban en tiempos distintos, de alguna manera estos primeros cuidados y reacciones hicieron un retiro de situaciones de cuidado. Como dejamos de ver y estar, hubo un crecimiento de la situación que cuando se volvió a una relativa normalidad, se identificaron estos cambios en la conducta.
Es un problema complejo y si alguna certeza hay sobre el problema es que cambia completamente el escenario y las formas. Es un problema también cómo adaptar nuestros sistemas de identificación de poder estar cerca de la situación. Instituciones o formas de operar que están pensadas para el siglo pasado.
Como ha pasado con todos los temas de violencia ha sido difícil de identificar y cambiar el marco jurídico, también de lograr desde otros sectores un reconocimiento a la situación. Sin dudas la cantidad de judicializaciones ha aumentado, también aumentó el número de presunciones sobre situaciones de explotación.
Detección
De múltiple maneras, puede ser una policlínica, en un equipo técnico del liceo o UTU, en un centro del CAIF, puede ser a partir de una denuncia que realiza un vecino frente a la situación que se da en el barrio, puede ser a través del 0800-5050 las denuncias anónimas, un cambio en la situación de una adolescente que ya estaba sufriendo situaciones de violencia y luego de estar en un hogar de amparo, comienza a tener otro tipo de conductas donde el equipo técnico puede detectarlo. Hay muchos ojos mirando el problema y creo que trabajamos mucho en fortalecer en leer lo que estoy viendo y construir colectivamente saber qué hacer.
Gobierno
La presencia de la vicepresidenta es un hecho inédito en los 7 de diciembre y ahí reafirmó el compromiso personal y del parlamento con el tema. No es un tema nuevo ni para el parlamento o la vicepresidenta, que en un momento de su vida fue directora del INAU, es una buena oportunidad de poder avanzar en algunas buenas leyes que tenemos. La 17.815 es una ley muy corta de cuarto artículos que habla de la retribución o promesa de retribución pero que hace énfasis de utilización de imágenes en pornografía de niños y adolescentes. Una ley que ha sido muy útil al momento de poder visualizar el problema. Y la otra, de reciente promulgación, la 19.643, entre otros aspectos crea el consejo sobre trata y explotación y la unidad especializada de atención y víctimas.
Penas
Son un aspecto, pero si hay que hacer algún cambio que tenga que ver con el tema de atención y restitución de derechos. Formas de reparación que no descarten la reparación económica y que pueda ser integrada como parte del trabajo.
Recuperación de los explotadores
Tenemos un atraso en ese sentido de trabajar con las masculinidades violentas y si bien hay proyectos que se están trabajando creo estamos lejos de encontrar servicios de atención. Tengo que ser sincero que ahora me preocupan más las víctimas.
Es una cadena inseparable, hoy estamos teniendo problemas para poder devolver la calidad de persona a las víctimas de explotación sexual y comercial. En el sentido de que siempre existe múltiples necesidades, cursos finitos para poder implementar programas, proyectos, forma de atención, de salida y eso es un gran debe que tenemos con el tema.
En las huellas de toda violencia son difícilmente reparables, esto lo afirman todos los especialistas que trabajan en violencia. En el caso caso sexual en niños y adolescentes es más complejo por la edad, la mirada de la sociedad ante esta situación, cortan muchos los caminos y posibilidades de inserción en una vida de ciudadano independiente.
Apoyo del Estado
Se ha hecho mucho, pero siempre decimos que falta. El presidente de INAU habló de fortalecer la llegada de los servicios al interior, fortalecer los servicios de atención oficiales y la creación de un dispositivo de 24 horas especializado en este tipo de violencias. También estamos viendo que hay muchísimos problemas para tratar niños, niños y adolescentes que llegan a centros de protección en una lógica de hogar que está pensado para atender otro tipo de situaciones como el abandono y otros tipos de violencia.
Efectos
Dos aspectos, en principio la explotación sexual comercial siempre implica el pago atribución o promesa, y existe una figura de tercero, no como el abuso donde el abuso intrafamiliar queda radicado al ámbito interno. Lo que si sucede esos adultos son parte de esos arreglos familiares es quien facilita la explotación y juega el rol de proxeneta. Existe un mundo que cada vez conocemos más y que tiene que ver con los explotadores quienes pagan o retribuyen. El segundo tema que tiene que ver con el tema de las redes y las aplicaciones, por un lado hay una masiva llegada a las herramientas de comunicación que de alguna forma invisibilizaron por un tiempo estos encuentros pero que han salido a la luz como la Operación Océano.
Esta aparente invisibilidad convivo también con el recorrido por las redes deja huellas, huellas que son rastreables, eso cambia la forma de mirar y de construir la prueba. También eso ayuda para el circuito de los padres y de cuidado también de empujar a la idea de que hay estar cerca y escuchar. Estamos intentando la forma de mejorar los registros, que se hacen desde los equipos que están trabajando en el territorio.
