Marta Jara considera que cumplió su ciclo en Ancap y no integraría el nuevo directorio: "Traté de aislarme de las cuestiones políticas"

"No tengo dudas de que hay ineficiencias, pero eso no quiere decir que traer el combustible va a ser más barato", apuntó la presidenta de la empresa estatal. "Estamos de acuerdo en que el futuro es eléctrico", agregó.

La situación de Ancap al cierre del 2019: abordamos el tema junto a la presidenta de la empresa estatal, Marta Jara.

La transición todavía no empezó en Ancap, pero enviamos información a los ministerios. Creo que Ancap hizo un trabajo interesante de ordenar la casa y queremos contárselo a las nuevas autoridades.

Tuvimos un trabajo bien arduo. Trabajamos con datos objetivos, mejoramos mucho los reportes para tener buenas fuentes de información. Establecimos disciplina: cada peso cuenta porque estamos usando recursos públicos.

Vázquez me llamó un día, no me preguntó a quién votaba. Me dijo que yo tenía una trayectoria en dirigir empresas del sector. Y me preguntó si me animaba a dirigir a Ancap para administrarla como una empresa.

Yo traté de aislarme de las cuestiones políticas y que los temas se analizaran caso por caso con una visión racional.

En el caso de la importación de combustible, dentro de la propia empresa veíamos que había gente que defendía a capa y espada el monopolio, pero no entendían realmente el valor económico que tenía refinar.

Es bastante intuitivo que lo más razonable es refinar localmente. Pero igualmente lo explicamos.

No tengo dudas de que hay ineficiencias, pero eso no quiere decir que traer el combustible va a ser más barato. Tal vez lo podríamos producir con menos costos. La distribución es muy cara y las estaciones se quedan con su parte.

¿Cuál va a ser el futuro de Ancap si los combustibles fósiles dejan de comercializarse? Nosotros queremos ser parte de la transición energética. Estamos de acuerdo en que el futuro es eléctrico. El desafío ahora es usar toda la electricidad que tenemos para el sector del transporte.

El futuro de ALUR implica seguir buscando eficiencias. El costo de producir bioetanol bajó como un 25 %, pero tenemos que seguir.

Vengo del mundo de la empresa. Cuando me llamaron fue para volcar lo que conozco en Ancap. Es duro hacer la mudanza cada tres o cuatro años. Nadie me quita el honor y la satisfacción de haber estado al frente de Ancap, en un trabajo maratónico. Quiero seguir contribuyendo a todo el tema de políticas públicas. Desde donde esté, haré mi activismo.

Creo que este ciclo se cumplió, no integraría el futuro directorio de Ancap. Me entusiasma ser una ciudadana activa. Cerré un ciclo. Me voy muy confiada porque quedaron equipos muy sólidos, eso es parte del legado.

En Gas Sayago tengo licencia sin goce de sueldo. Cobro un solo sueldo, que es el de Ancap. Ahora cuando termine en Ancap, supongo que volveré a la nómina de Gas Sayago y me despedirán.


Las Más Vistas