Penadés tras el referéndum: "La gente terminó expidiendo más por su preferencia política partidaria que por el contenido"

El senador por el Partido Nacional expresó que el comportamiento del pueblo uruguayo "es muy similar al último referéndum vinculado a la modificación o no de la Constitución de 1996". "La LUC no es una varita mágica que solucionará los problemas ni tampoco la madre de todos las catástrofes", agregó.

Referéndum

Lo importante que hoy todos tenemos claro es que los 135 artículos de la LUC no fueron derogados. Después todos los análisis darán para cualquier tipo de conjeturas y están bien, son todas muy respetables.

Después de 2 años de gobierno, en un contexto muy difícil que nos ha tocado atravesar en el mismo, el gobierno y el presidente Lacalle Pou lograron que la columna vertebral de su gobierno, la LUC, se mantuviese incólume y que sus 476 artículos hoy están vigentes tal cual lo determinó el parlamento nacional.

Estuve revisando el último referéndum vinculado a la modificación o no de la Constitución de 1996, el comportamiento es muy similar a lo que sucedió ayer. Lo que termina sucediendo que la gente terminó expidiendo más por su preferencia política partidaria que por el contenido mismo de lo que se pretendía o no derogar. En ese sentido se obtuvieron los resultados que por lo menos yo esperaba, que el Sí no alcanzara el número de votos requeridos para derogar los 135 artículos de la LUC. Es todo muy legítimo.

Si ayer hubiese sido el balotaje, el presidente Lacalle Pou hubiese sido el presidente de la República, punto final.

La LUC no es una varita mágica que solucionará los problemas ni tampoco la madre de todos las catástrofes. La LUC contiene gran parte de las herramientas que el gobierno entendía que debía contar con su aplicación más rápida posible para gobernar, es por eso por lo que se utilizó el mecanismo de la LUC.

Se está gobernando, en algunos casos se obtienen resultados positivos y hacia la dirección hacia los tratamientos de temas graves, hay otros problemas que siguen latentes y otras reformas que tendremos que encarar. Ayer no empezó nada ni terminó nada.

El Uruguay no creo que esté dividido. Tenemos que trabajar para que así no lo esté. No están ayudando actores de muchos lados. Uruguay tiene un porcentaje de adhesión muy similar. Durante 15 años, sobre la mayoría del Frente Amplio nadie la cuestionó.

Se debe respetar la construcción de mayoría. Esperamos tener una construcción de mayoría más grande y si eso no sucede, mientras sea por un voto, por 10 o por 50 la mayoría está garantizada.

Al presidente del Frente Amplio le preguntaría objetivamente si hoy nos sentimos que el presidente Lacalle Pou dialoga más que el gobierno de Tabaré Vázquez, que tiene un contacto más cercano con la población comparando con presidentes anteriores.

Por supuesto que se tiene y se debe escuchar a la otra parte del país. El momento de gobernar hasta el 1º de marzo 2025 la legitimidad de este gobierno es indiscutible.

Vamos a no dramatizar, me preocupa que desde cualquiera que no le toca ser gobierno acusa al gobierno de no escuchar. Hay un sin número de reuniones que no toman estado público en el que el presidente se reúne con los líderes de todos los partidos.

Quizá lo que sirvió la LUC de puerta para adentro de la coalición fue que amalgamó. Participar todos del mismo objetivo. Se fusionó en un régimen de coordinación que nos servirá para encarar esta segunda etapa de gobierno que se avecina.

Soy de los que tiene un sentido trágico de la actividad política de cumplir el deber, enfrentar los costos que tengamos que enfrentar.

Dialogo político

En toda sociedad democrática todos los actores valen. Lo que tiene que haber es que entender que el Uruguay tiene que encarar una serie de reformas con un amplio consenso. La seguridad es un gran problema y cómo se financia es otro. A la hora de explicar vamos a trabajar con seriedad.

Educación

Es un gran error pensar que la LUC es una especie de solución de todos los problemas. Está centrada sobre un estilo de gobernanza que debe existir y que comience el proceso de los cambios que la educación debería de tener. Una visión hacia donde se va.

En el 96’ yo estaba en el parlamento y el Frente Amplio votó en contra de la reforma de seguridad social y hoy reconoce que fue una gran reforma. Cuando llegaron al gobierno no le cambiaron ni un artículo.

Lo que no se puede es cuestionar la legitimidad. Lo que muchas veces sucede desde la izquierda es que cuestiona la legitimidad, utiliza la relatividad y eso no está bien.


Las Más Vistas