"Hay que cambiar el chip porque los problemas que hay que resolver son los problemas del Uruguay del 2020 y no del 2004", afirmó el diputado.
El diputado frenteamplista (MPP) Alejandro Sánchez hizo en las últimas horas un nuevo llamado a la “unidad del Frente Amplio”, en momentos en que fue postergado el Plenario que definiría las precandiduras de la fuerza política.
Mientras tanto, el MPP divulgó un documento donde establece una “estrategia” para que el Frente Amplio pueda ganar en las próximas elecciones.
Abordamos estos y otros temas junto al legislador.
La unidad es algo muy importante. El Frente es la diversidad en la unidad. Lo más importante no son los sectores, las personas o los candidatos, sino el proyecto político que representa la izquierda uruguaya. Históricamente, el Frente no es una unidad ideológica, pero sí una unidad programática de propuesta de transformación del país.
Yo pertenezco al sector más grande del Frente Amplio, pero eso no me hace más importante. El sector más grande es cuando el Frente Amplio está junto. Si no integramos las visiones del resto de los compañeros, aunque sean minorías, la mayoría queda sola.
Sería de locos que no hubiera cambios en la política económica, por ejemplo. Tenemos que bajar los costos, mejorar el acceso al crédito para el cambio tecnológico y al acceso a la energía, por ejemplo. Sin crecimiento no hay distribución. Todavía quedan sectores muy postergados y muchos que tienen que salir de la pobreza, por lo que tenemos que acelerar el proceso de crecimiento económico. Tenemos que cambiar nuestra inserción internacional y nuestra política económica en algunos aspectos.
Está bien que se le den beneficios a los grandes inversores, como UPM, porque sino no llegarían a Uruguay. Pero también hay que darles beneficios a los pequeños inversores, como acceso barato al crédito, porque incorporar tecnología e innovación suele ser muy costoso.
Hay que cambiar el chip porque los problemas que hay que resolver son los problemas del Uruguay del 2020 y no del 2004. Uruguay ha cambiado y tenemos que construir las herramientas para resolver los problemas que hoy tiene la gente.
El agotamiento puede ser porque se cumplió un fin o porque se cometieron errores. Creo que el modelo no está agotado en un sentido negativo. Hay cosas que dieron buenos resultados y otras que no, porque el Frente Amplio no es infalible.
Creo que en la seguridad no hemos encontrado los resultados esperados: tenemos que reconstruir, ver qué dio resultado y qué no, y en base a esa experiencia proponer algo diferente.
Uruguay hoy es el campeón del mundo en los estándares internacionales de desigualdad, por lo que hemos logrado construir y de forma rápida. No se puede decir que las políticas sociales fracasaron, pero sí que cumplieron su tiempo en función de los problemas que tenía el país.
En la educación hay claros y hay oscuros. Tenemos una institución educativa del siglo XIX, docentes formaos en el siglo XX y estudiantes del siglo XXI.
Hay que poner los informes del Tribunal de Conducta Política en el orden del día. De los 14 informes, el que tiene a todos preocupado es el de Sendic, todos quieren hablar de eso. Ahí también está Darío Pérez, Gonzalo Mujica, uno de Semproni que está muerto. No le niego a nadie la posibilidad de presentarse a elecciones. En una democracia lo sustantivo es poder ser elegido o elegir, y eso solo lo puede restringir la Justicia. Pero es cierto que puede haber algún rebote del tema en el Frente Amplio y en las elecciones. Ninguno de mis compañeros se ha enriquecido durante la gestión del Gobierno. En el caso de Sendic no hubo enriquecimiento, sino la mala utilización de un elemento.
Lo de Brasil a mí me da miedo porque es una sentencia de muerte para mucha gente. Las cosas que dicen Bolsonaro es una sentencia de muerte para muchos seres humanos.
Nosotros hemos dicho que nuestro candidato es el Frente Amplio. Hay dos instancias para resolver. Un Plenario Nacional, por un lado. Mujica ha dicho insistentemente que no va a ser candidato, por varias razones, y hay que entenderlo y escucharlo. La presión que tiene de la gente para que sea candidato es muy grande, y no estoy exagerando. En el Plenario Nacional vamos a votar a todos los candidatos, que es la habilitación para que en el Congreso se habilite quienes pueden ir a la interna. En el Congreso, el MPP debería votar a todos también, creo yo. Cuando se decidan los apoyos a las listas, ahí sí es momento de decidir.
Partimos de la base de que lo importante es el Frente Amplio. Dentro del MPP hay quienes tienen más afinidad o más gustos por uno u otro. Pero cualquier de los propuestos es inmensamente mejor que lo que proponga la oposición. Tenemos que olvidarnos de la batalla por el poder y centrarnos en el programa del Uruguay que queremos en el futuro.
