Conversamos con el nuevo presidente de la Asociación Rural del Uruguay, Gonzalo Valdés, quien habló sobre los 150 años de la asociación, la reducción de la huella ambiental, las expectativas de crecimiento de las exportaciones y el papel del gobierno uruguayo en el sector.
150 años de ARU
Lo que tiene que ver con la conmemoración de los 150 años es en un año complicado. Teníamos previsto realizar diversas actividades homenajeando y reconocimientos a personas que han pasados por todos estos años en la gestión. Las vamos a tener que esperar un poco ver si más sobre fin de año o el año que viene poder llevar delante de lo que teníamos pensado.
Debido a la situación sanitaria por supuesto que hay que tener mucha cautela con todas las actividades que se realizan. Ya van dos años que suspendemos nuestra exposición de Melilla, pero la asociación uruguaya rural sigue adelante como siempre.
Reducción de la huella ambiental
Es un tema muy importante. Se hizo la presentación del equipo de trabajo del Ministerio de Ambiente y el Ministerio de Ganadería. El resto de Uruguay como país ganadero y agroexportador es poder dar los criterios, poder medir y demostrar que Uruguay es un país neutro y hasta negativo en la emisión de carbono. Esa propaganda o marketing que se ha hecho contra la producción ganadera no es así. Entendemos que funciona distinto. El metano no es lo mismo que el carbono, es un ciclo distinto. En las dotaciones que hay hoy en día de ganado y mejorando incluso la pastura y toda la parte vegetal cuidada al sector. Se mantiene un equilibrio muy bueno. Tiende a ser negativo en cuanto a la emisión de carbono.
Gobierno uruguayo
El gobierno uruguayo tomó las medidas adecuadas. Acá el tema inicial que siempre me cuestiono del equilibrio que hacía referencia en la ganadería con la parte vegetación y fotosíntesis, trasladado a los laboratorios que produce el producto sintético. No me gusta utilizar el término obviamente. Esa industria, ese laboratorio, ¿qué tipo de emisiones tiene?, ¿negativo, positivo o neutro? Si acá se trata de huella de carbono hay que ver todas las actividades y el equilibrio de las cuales se desarrollan.
Más analizando en el tema macro en los mercados internacionales es evidente que los últimos años se ha dado mucha importancia a lo que es la carne natural y esa carne natural implica la crianza de ganado a pasto, lo que nosotros tenemos y los que los mercados internacionales valoran. Por ende están pasando a categorías de commodities, ya de menos valor. La carne criada en otros países donde se utilizan hormonas con motores de crecimientos y antibióticos que en Uruguay están prohibidos hace muchos años. En definitiva queremos al Uruguay lo que corresponde al nivel de producción tenemos una gran oportunidad capturar esos nichos de mercados importantes y que importan un gran valor.
Demanda
Al principio de 2020 la caída de exportación fue importante. Ahora estamos en una recuperación que está un poco por encima del 2019. Hay buenos precios, por supuesto los precios internacionales de la carne como de la soja y demás están siendo buenos. La gran cuestión es cómo el productor uruguayo o el sector agroindustrial o agronegocio captura esos precios. Hoy estamos evaluando una soja que está superando los 500 dólares, algo que nos sorprende a todos. No tomar en cuenta el precio al día de hoy sino por lo menos del último año.
Durante todo el periodo presiembra se adelantan ventas a menores valores que los actuales, entonces no estamos recapturando el precio de hoy. Es una expectativa que en la zafra siguiente se pueda mantener ese precio. Hoy no hay una mejor específica que le diga al productor sino que son expectativas.
Otro elemento importante que nos afectó fue la emergencia climática que afectó en dos partes, primero el volumen de rendimiento de los cultivos ha bajado mucho. Están dando una tonelada un poco menos o un poco más, están muy por debajo de las expectativas de lo que es un rendimiento promedio en Uruguay. Tampoco por tema de volumen estamos en una situación de captar los precios.
El panorama no es el más adelantador porque no es un momento que estamos captando precios excepcionales. Uno cuando mira el mercado internacional y sus precios da expectativas. Somos conscientes de que es una actividad de las menos perjudicadas de la economía nacional y ni que hablar comparando con un caso extremo como fue afectado el sector de turismo. Como país exportador, los productores nos sentimos con gran desafilo con tomar las medidas necesarias y de proponerle al gobierno las medidas necesarias para que el sector pueda desarrollarse y generar precios, principalmente empleo que derrame el crecimiento del sector agropecuario sobre toda la sociedad rural y en todos los pueblos, villas y capitales departamentales como lo hace normalmente. El agro de por sí es el sector, que más allá de todas las dificultades tiene la gran posibilidad de colaborar el desarrollo de la economía nacional.
