Uno de los abogados del mafioso italiano detenido en Uruguay sostuvo: "Hay mucha fantasía alrededor de este caso"

Víctor Della Valle explicó varias puntas de este caso. Y desde Punta del Este, el periodista Marcelo Umpiérrez mostró la casa de Rocco Morabito.

El periodista Marcelo Umpiérrez explicó que actualmente la mujer de Morabito no se encuentra en su casa de Punta del Este. Además, contó que a pocas cuadras vivía el líder de Los Cuinis, Gerardo González Valencia, quien fue detenido en abril de 2016. La casa de Morabito se vendió en 2015 en más de un millón de dólares y Morabito paga actualmente un alquiler mensual de alrededor de 10.000 dólares.

El periodista Marcelo Umpiérrez sostuvo:

Morabito nunca tuvo conflictos ni problemas, los vecinos aseguran que es una familia tipo normal, con un perfil relativamente bajo a lo que es la zona. Él es un hombre muy amable, que trabajaba en su campo en Ruta 9. En lo personal me crucé un montón de veces con su esposa que hacía las compras como cualquier vecina.

Víctor Della Valle, uno de los abogados de Rocco Morabito, explicó:

Morabito está en manos de la Justicia uruguaya. Él no declaró ante Interpol porque no correspondía. Primero queremos saber de qué lo acusan, acá fue procesado por la cédula y el pasaporte. Normalmente sería un delito menor, si fuera un uruguayo cualquier capaz que lo procesaban sin prisión. Acá lo procesaron con prisión por ser extranjero, es lógico.

Es un delito menor y en dos o tres meses podría estar excarcelado. Se pide la captura internacional por Interpol, lo detienen, se le comunica a Italia que tiene 90 días para mandar las causas o pedidos de procesamiento y ahí nosotros nos enteramos de qué está pasando. Hasta el momento son solo trascendidos de prensa, todavía no vimos ningún proceso ni nada.

En relación a cómo se ganaba la vida, Della Valle detalló:

Él compró un campo en 1.600.000 dólares, vendió una parte, compraba y vendía ganado. Él dice que tenía un restaurante en Milán que vendió, se fue a Brasil a trabajar pero a la mujer no le gustó San Pablo por la inseguridad. Y luego se vino para acá.

 


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