Homenajeamos a la gastronomía francesa con dos recetas súper deliciosas.
Sopa de cebollas
4 cebollas
2 cdas de harina
Aceite de oliva
1 lt de caldo de verduras
1 vaso de vino blanco
Sal y pimienta
Rodajas de pan
Queso parmesano
Perejil picado
Cortar las cebollas en juliana fina y dorar en una cacerola con un poco de aceite de oliva. Cuando estén bien doradas, agregar la harina y cocinar por un minuto revolviendo continuamente. Incorporar el vino blanco, sal y pimienta y por último el caldo. Cocinar hasta que espese un poco. Gratinar sobre una rodaja de pan un poco de queso rallado y colocar encima de la sopa justo antes de servirla. Espolvorear un poco de perejil picado.
Créme brulee
4 yemas
¼ T de azúcar
1 cta de almidón maíz
1 ¾ T de crema de leche
1 vaina de vainilla
Azúcar extra c/n
Batir las yemas con el azúcar hasta que queden algo pálidas. Añadir el almidón, mezclar bien y luego incorporar la crema hirviendo bien de a poco y sin dejar de revolver. Pasar la mezcla a una cacerola, incorporar la vaina de vainilla abierta y llevar a fuego suave-moderado revolviendo continuamente con cuchara de madera hasta que espese. No dejar que hierva. Retirar del fuego, revolver unos minutos para que enfríe y colocar en los recipientes donde se va a servir. Dejar enfriar por completo. Espolvorear con azúcar y quemar con flambeador o plancha caliente.
