Nueva directora de ASSE tuvo un sumario porque estuvo certificada durante 500 días pero continuaba cumpliendo sus tareas como edila de Canelones

La nueva directora de Desarrollo Humano de ASSE, que fue además edila por el Partido Nacional en Canelones, tuvo un sumario en sus funciones en la salud debido a que estuvo certificada durante más de 500 días sin presentarse a trabajar, mientras concurría a realizar sus tareas a la Junta Departamental. El sumario fue archivado días antes de que el nuevo directorio la nombrara en el cargo.

Neurosis era el motivo que señalaban las certificaciones médicas presentadas por Silvia de Borba, una militante de la lista 71 de Partido Nacional y edila por Canelones, que además desempeñaba funciones en ASSE.

Según informa el semanario Búsqueda este jueves De Borba presentó 18 certificaciones médicas en ASSE entre febrero y julio de 2017 por un total de 502 días, al mismo tiempo continuaba concurriendo regularmente a sus funciones en la Junta Departamental de Canelones.

Desde ASSE se le inició una investigación por este motivo. La defensa de De Borba, basada en reportes de profesionales, fue que el trabajo de edila se entendía como una actividad recreativa recomendada en el marco de un cuadro depresivo.

El 7 de mayo, luego de la asunción de las nuevas autoridades de ASSE, se clausuró y archivó el sumario de De Borba. El 22 de mayo fue nombrada en el cargo de directora de Desarrollo Humano de esa institución.

Qué hacer para evitar que la situación económica afecte al millón de personas vulnerables

El análisis económico de Laura Raffo muestra cómo a pesar de que en Latinoamérica 72 millones de personas salieron de la pobreza en los años últimos, pero todo esto está puesto en jaque por las nuevas complicaciones.

El Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo presentó frente al Parlamento Latinoamericano y Caribeño (Parlatino) su informe de Desarrollo Humano para la región. Si bien destacó los millones de latinoamericanos que lograron salir de la pobreza y entrar en la clase media en la última década, alertó sobre el las vulnerabilidades que traerá esta época de menor crecimiento.

Repasemos los principales números del informe regional y de Uruguay. En los últimos diez años, Latinoamérica logró una transformación histórica: 72 millones de personas salieron de la pobreza, y 94 millones ingresaron en la clase media.

Alrededor de 140 millones de personas, que constituyen cerca del 24% de la población regional están por debajo de la línea de pobreza de US$4 por día, y casi 67 millones se encuentran bajo la línea de pobreza de US$2,5 por día. Más de 224 millones de personas, que componen el 38% de la población total, se encuentran en situación de vulnerabilidad económica, con ingresos de US$4 a US$10 por día.

En Uruguay las cifras son todavía mejores: la pobreza bajó de 19% al 7; la población vulnerable pasó de 36% al 29%; la clase media aumentó de 42% al 60, y los que están por encima de eso subieron del 3 al 4%. Es bastante importante la población en situación de vulnerabilidad, cerca de un millón de personas.

El informe de PNUD alerta sobre la amenaza de que crezcan nuevamente los niveles de pobreza. ¿Qué pasa con esta gente vulnerable en Uruguay ahora que la economía crece menos? Se estima que entre 25 y 30 millones de personas podrían verse afectadas negativamente por la nueva realidad económica, y el problema es que todavía queda un sector muy importante de la población en zona vulnerable. Las características de estas personas en Uruguay suponen que en un 39% la mujer es la jefa de hogar, por lo que es fundamental impulsar todavía más la inserción femenina en el mercado y las oportunidades laborales; otro dato es que menos del 3% de este millón de personas posee educación terciaria, y muchos de ellos ni siquiera tienen Secundaria completa; por otro lado, la mitad de estas personas tienen empleos informales.

El PNUD recomienda todo eso y también mejorar el sistema de cuidados, la ampliación de la cobertura de los centros infantiles especializados y de los servicios de acompañamiento a la población adulta mayor con alto grado de dependencia,

Se señala que los avances de estos años se lograron no solo por el crecimiento económico sino también por la implementación de políticas públicas. Lo más destacable fue la mayor participación laboral de las mujeres, o el mayor acceso a los servicios básicos, educativos y de salud. Por lo tanto hay que seguir trabajando en el trabajo decente, la calidad de la educación, la igualdad de género y la protección social, sistema de cuidados.

“Más de lo mismo” no rinde lo mismo. En años recientes se ralentizó el ritmo de salida de la pobreza, así como el ritmo de ingreso a las clases medias. Mientras que, en promedio, 5,9 millones de personas por año salieron de la pobreza en el período 2002-2012, el ritmo cayó a un promedio de 3,1 millones de personas por año en 2013 y 2014, y se estima que en los años 2015 y 2016 este proceso se ha revertido, proyectándose un aumento absoluto del número de personas que se encuentran en situación de pobreza por ingresos.