La Justicia pidió diez años de cárcel para los policías que fueron imputados por extorsión, asociación para delinquir, peculado y privación de libertad

Todos pertenecían a Zona IV de Jefatura de Montevideo y en su mayoría eran jerarcas.

Los delitos que le caben a los efectivos policiales de la zona cuatro son extorsión, peculado, violación de domicilio, privación de libertad grave y asociación para delinquir.

La fiscal Ana Laura Roses pidió este martes la extensión de la prisión preventiva para cinco de los seis policías que fueron imputados en el mes de junio, además de presentar acusación y pedir diez años de prisión para los agentes investigados.

El juez de la causa, Sebastián Amor, hizo lugar al planteo de Roses, según informó el diario el país este miércoles por la mañana.

La Fiscalía afirma que no llegó a un acuerdo con la defensa para lograr un proceso abreviado. Roses ofreció acordar a la defensa para que se impusiera una pena de seis años, pero para la defensa de los policías la pena debería ser menor ya que entiende que sus defendidos colaboraron con la investigación.

El caso se hizo público el 22 de mayo cuando un familiar de un joven que había sido detenido en Nueva Helvecia preguntó a la Policía local por su paradero.

El joven había sido detenido por los policías de la zona cuatro de Montevideo, varios de ellos jerarcas, en momentos que era investigado por estafa y le dijeron que lo iban a dejar libre e iban a decir que no había elementos para inculparlo, a cambio de una suma de dinero de medio millón de pesos.

El hombre les entregó 270.000 pesos y fue trasladado desde Montevideo a Colonia. Luego, se realizó la denuncia y la investigación terminó con la detención de seis policías, en su mayoría jerarcas, de los cuales cinco resultaron imputados.

El caso llevó también a que se cambiaran en su totalidad las autoridades de la zona cuatro de Policía de Montevideo.

Los finalistas de Destacados 2016 recibieron cursos de capacitación por parte de la ONG Socialab

El objetivo es que puedan aprovechar de la mejor manera la exposición y repercusión que les brindó el programa, más allá del premio económico que recibió el ganador.

La ganadora de destacados 2016, Walkiria Leites,  contó que con el dinero recibido ya se hicieron obras de reparación en el CAIF Nazarenito, que fundó en 2008 y que actualmente atiende 182 niños, mientras otros 30 están en lista de espera.

Agregó que en breve comenzarán a construirse un nuevo salón para entrevistas personales y una batería de baños.

“Muchos sueños anteriores de cosas que había hecho por mi barrio y que se van cuajando y me ha dado mucha felicidad. Agradezco todo el empujón que me han dado para seguir ayudando”, dijo Walkiria

Desde  un principio estuvo previsto que el trabajo con los Destacados 2016 no terminara en la gala del pasado 27 de noviembre y el acompañamiento siguiera más allá del premio económico.

Lucero Olivera, directora de Startup, explicó en qué ayudará esta experiencia a los cuatro finalistas: “cómo enfrentar esa situación y poder planificar un 2017 bien centrados, sin perder el foco, acompañando todo este ritmo nuevo”.

Tanto Walkiria como Felipe Silva, que con 20 años encabeza el movimiento Luceros, y Ruben Suárez, que lleva adelante el proyecto Street Basket en la ciudad de Libertad, trabajaron temas la como planificación estratégica de fondos, la gestión de voluntariado y la formalización.

“Tantas donaciones, tanta gente que se acercó, que después hay que bajarlo a tierra y hay que llevarlo al trabajo del día a día. Primero que nada esta jornada sirve para eso y después para capacitarnos, para seguir formándonos como personas que buscan el bien en la sociedad”, dijo el joven Felipe Silva.

La cuarta destacada, Ana Gallinal, fundadora de la biblioteca comunitaria Fomentando Sueños, no pudo viajar desde Artigas por cuestiones climáticas pero recibió las orientaciones a través de Skype.

“La idea es que de aquí salgan con muchas ganas de hacer cosas y concretarlas, y nosotros hacer el seguimiento de cómo evolucionan, de dónde están más flojos, cómo acompañarlos en ese período, pero creo que están con muchas ganas de avanzar”, dijo Luceo.

“Nunca se me había pasado por la mente cómo poder pegar un salto más grande. Si bien el proyecto vino creciendo desde hace años, con más participación de chicos, con instituciones que se iban acercando al proyecto a nivel local”, contó Ruben.

Walkiria finalizó: “nos llevamos unas cuantas herramientas y hay cosas que no las habíamos tenido en cuenta y otras cosas que no sabíamos, así que estamos también aprendiendo”.