Desde agosto de 2016 las autoridades de salud comenzaron a poner especial atención a las malformaciones congénitas, sobre todo a las caridopatías que son una de las principales causas de muertes en los niños.
De los 460 niños que nacen con cardiopatías congénitas por año en Uruguay, 160 constituyen casos graves y tanto el MSP como la Fundación Corazoncitos coinciden en la vital importancia del diagnóstico precoz.
La subsecretaria del MSP, Cristina Lustemberg, explicó:
Hay un decreto que hace obligatoria, y dentro de las prestaciones gratuitas, la ecografía estructural entre las semanas 20 y 24. Una mujer embarazada que se le diagnostica que se feto tiene una cardiopatía congénita no es lo mismo, de acuerdo al tipo de cardiopatía, que ese niño o niña nazca en un centro altamente especializado donde esté el equipo entrenado y con la tecnología para garantizar la supervivencia y las mejores condiciones de atención.