Suba de los combustibles: "Hay soluciones económicamente factibles que políticamente no lo son"

El precio del petróleo ha incrementado, lo que ha aumentado el precio de los combustibles a nivel global; y Uruguay no ha estado exento de esta tendencia. Ajustó los precios por quinta vez desde que rige el nuevo marco regulatorio que fija los precios, tomando como referencia el precio de paridad de importación de la URSEA.

Esta decisión ha revivido el debate sobre la discrecionalidad con la que se define este tipo de ajuste. Además, fue el foco de análisis de un estudio del Centro de Estudios para el Desarrollo, que examinó las implicancias del nuevo marco regulatorio que establece la LUC y también lo comparó con administraciones anteriores.

El incremento en el precio del petróleo y la suba de combustibles

Lo primero que podemos comunicar es que Uruguay tiene combustibles estructuralmente caros. Está en el 20% de los países del mundo con combustibles más caros. Lo que pasó en los últimos 12 meses, no tiene nada excepcional ni de particular. Los aumentos en Uruguay estuvieron en línea con lo que está pasado en todo el mundo. Venimos en un proceso de aumento largo por varios motivos: la oferta que se venía restringiendo en algunos lugares, por algunas tensiones; y lo que está pasando ente Rusia y Ucrania, en particular es el gas el más afectado, lo ha disparado a una escalada de a 10 dólares por día. Nadie sabe si es un pico y va a rebotar, si va a ser una meseta. Lo que sí es claro es que vamos en un proceso largo de petróleo caro.  El petróleo hoy está mucho más caro del que tomó la URSEA para hacer el último informe.

El principal costo que principalmente Europa, y ahora Estados Unidos, parece que están dispuestos a pagar es una energía muy cara. Se armó un combo en el mundo y no podemos esperar que esto vaya mermar en el corto plazo. Rusia es un actor de primera línea en lo que es combustible fósil.

Posibilidad de un aumento exponencial en el precio del petróleo

Parece muy alocado. Estamos en un contexto de guerra que no sabemos cuánto va a durar. Lo que sí es claro, y porque estaba armado antes de que comenzara el conflicto entre Rusia y Ucrania, es que el combustible venía en una pendiente ascendente por otros motivos previos a eso. Esto solo agravó.

¿Hay alguna forma de aplacar esto?

Es muy política la pregunta. ¿Qué estamos dispuestos a hacer? Subsidiar la nafta, y hablo del gasoil también, puede tener un impacto positivo en la cadena de costos porque todos usamos nafta de alguna forma, nos transportamos de alguna forma, consumimos productos que llegan al supermercado movidos por los combustibles.

Ahora los estudios dan que cada dólar, peso que el gobierno pone para que no suba la nafta, se distribuye muy desigualmente. Es regresivo. Se lo apropia mucho más los ricos que los pobres. Los que tenemos más oportunidades nos manejamos en auto, y consumimos más combustible. Por ejemplo, una de las connotaciones negativas es que el subsidio de la nafta acá es que ANCAP, el gobierno, pone plata para que el precio no suba más de lo que debería subir según los costos. Es una medida que tiene cosas positivas, pero que tiene connotaciones negativas por el lado de la distribución de ingreso. Hay razones económicas, distributivas, ambientales y es un combo complejo.

Nuestra postura es que sí es razonable desde el corto plazo amortiguar shocks, tratar de evitar volatilidades, pero que si los precios altos se mantienen, que sean transparentes las tarifas y que reflejen los costos. Los otros problemas atacarlos por otro lado. El problema que tenemos con las tarifas muchas veces es que le pedimos muchas cosas. Le pedimos ocho objetivos a un instrumento y eso no termina bien en general.

Las medidas de la LUC en cuanto a precios de combustibles

Creo que el aporte de la LUC, que no tuvo ningún impacto con respecto a que suba o baje el combustible, sí mejoró la calidad de discusión. Una vez al mes la URSEA publica un informe que es una referencia técnica, objetiva, que nadie pone en cuestión, de cómo se movieron los costos. Tenemos una referencia para hablar con propiedad si hay sobreprecios o precios subsidiados.

La promesa de incidir sobre el costo del combustible y que bajara

No pasó y lo que muestra el informe es que con el análisis de los últimos 12 años, y a partir del famoso PPI, trata de mirar en cada combustible cuando hubo precios sobreprecios y cuando hubo precios subsidiados. Creo que la principal conclusión es que los precios del combustible han sido muy inflexibles a la baja. Cuando el petróleo subió los políticos dicen que no les queda otra que ajustar. Cuando el petróleo bajó, no hay una demanda social de bajar la nafta.

El precio de la nafta en Uruguay en relación con el mundo

Hay muchos años de mucho sobreprecio. Creo que ahí hay una parte del problema, que Uruguay tuvo sobreprecios bien relevantes en sus dos combustibles. En la nafta depende del momento, en el gasoil en casi todo el período analizado, 2015 a 2019. 2020 cambia el gobierno, pero se mantienen los sobreprecios. A partir del 2021, las cuentas dan que al revés, los uruguayos pagamos combustibles más baratos de lo que hubiera salido importarlo.

Hay un cambio metodológico que hace que la cifra del 2021 no sea estrictamente comparable con la cifra de los 11 años anteriores, que sí son comparables entre sí, porque la forma del cálculo no es la misma. Creo que no cambia el grueso de la foto. En el período de 2015 a 2019 tenemos 1.780 millones de dólares más que pagaron los uruguayos de lo que hubiera salido importarlo. Sin contar los combustibles que tienen una carga tributaria importante y que nadie está discutiendo.

Hay dos preguntas que son incómodas para la sociedad. Una, el tema de los impuestos. Se recauda por combustibles un punto de PBI por año de impuestos. Ahora se agrega que la tendencia internacional es que hay que gravar los combustibles por motivos ambientales. Nosotros aplanábamos de impuestos la nafta. Una parte del impuesto que le cobrábamos lo pasamos al impuesto al carbono para estar en línea. El efecto económico es el mismo: desincentivar el uso del combustible.

Lo otro es el famoso sobreprecio, que son menos de tres pesos. Cada vez que alguien dice “¿Qué tal si modificamos, cómo hacemos el subsidio al supergas? Arde Troya. ¿Cómo hacemos con el porlan? Arde Troya. El sistema político no tiene ni la decisión para hacer una cosa. La sociedad quiere combustibles baratos, pero tampoco parece dispuesta a pagar el costo de soltar otros negocios de ANCAP.

Hay soluciones económicamente factibles que políticamente no lo son. En lugar de subsidiar la oferta del supergas mucho más barato de lo que cuesta, al 40% más pobre de los uruguayos le das un subsidio por plata por ese monto que le vas a dar, y dejás que suba le supergas. Le quitas el subsidio al que calienta la piscina con supergas y los otros que estamos en el  ingreso del 40% mayor, y lo dejás focalizado.

El subsidio de la nafta y del gas oil

Se podría hacer. Es importante que sea políticamente viable y que la sociedad lo acepte. El 40% del precio de los combustibles son impuestos. Después, está el famoso factor x. Lo que está mal son los subsidios oscuros, encubiertos. Liberar los distintos factores que son precios relativos que están enturbiados por tantos subsidios cruzados. Creo que eso es razonable. Si queremos seguir subsidiándolo o no, pero es una discusión mucho más costosa y en algunos casos me queda claro que la preferencia política y social es seguir subsidiando.

La influencia del sobreprecio de la nafta en relación con el sobreprecio del gas oil

Tiene connotaciones distintas. En el gobierno de Mujica se da la diferencia muy marcada. El gas oil tuvo sobreprecios, pero la nafta también fue un período parecido a este de precios internacionales muy buenos, pero precios de petróleo caros. El gobierno en aquella época tuvo varios años que subsidiaba la nafta. El gas oil se tuvo mucho menos de consideración. En aquellos años la rentabilidad del sector agroexportador estaba muy bien. Estamos en un momento parecido en ese sentido, de que los combustibles están muy caros, pero el sector agroexportador está disfrutando de muy buenos  precios. Es un combo que probablemente lo puede soportar sin problema. Es mucho más problemático para los que tenemos ingresos en pesos.

El impacto del aumento de los combustibles en la inflación

En el gas oil está la cadena productiva. En todos lados, además del tema del combustible, hay inflaciones disparadas. Ahora está el tema del trigo. Tenemos un problema enorme en ese sentido. Va a haber mucho trabajo en Uruguay sobre los costos que con la tendencia internacional viene complicada. No quita que los períodos de 2010-2013 fueron buenos años para Uruguay porque al final un hay sector exportador pujante, tiene un impacto en las economías locales, llega también a las ciudades. El contexto de presión inflacionaria es complejo, pero buenos precios de los commodities, a pesar de lo del petróleo, es una buena noticia para Uruguay.

Creo que la gran tarea pendiente es la recuperación del salario, pero el empleo se recuperó antes de lo que todos estábamos previendo hace tres, cuatro meses. Tiene que ver con todo esto. Un dato que se habla poco es que en 2021 cayó un poco el salario, pero aumentó un poco el ingreso de los hogares. Muchísima gente recuperó el trabajo y eso hizo que el ingreso de los hogares subiera. Es complicado, tiene varias puntas.

Hay una revalorización de la apuesta que hizo Uruguay con el tema de energías renovables, que bajó el petróleo. En un momento no era rentable en ese momento porque estábamos pagando caro la energía de los molinos. Ahora, con todo esto, se volvió una maravilla el precio que estamos pagando por la energía.

Un grupo de personas cortó el tránsito frente al edificio de Ancap en reclamo por el precio de los combustibles

Bajo la consigna "Uruguay unido por la baja del combustible", reclamaron que el pueblo trabajador no soporta más aumentos.

Con pancartas y altoparlantes, un grupo de manifestantes interrumpió el tránsito sobre avenida del Libertador en reclamo por el aumento del precio de los combustibles.

Bajo la consigna "Uruguay unido por la baja del combustible", reclamaron que el pueblo trabajador no soporta más aumentos.

El reclamo es en referencia a la última suba decretada por Ancap de un 9 % para las naftas, el querosén, el fuel oil y el gasoil 10-S, que se concretó a principios de julio.

 

El director de Ancap por el Partido Nacional votó en contra de la decisión de subir los combustibles

Diego Labat dice que es hora de plantearse temas de fondo, como el peso de los impuestos en las naftas.

El director de Ancap por el Partido Nacional, Diego Labat, no apoyó el ajuste de 9 % en los combustibles.

Pese a que el precio del petróleo y el tipo de cambio subieron y condicionaron los costos del ente, Labat sostuvo que es hora de pensar en alternativas.

“Es necesario tomar otro tipo de medidas. Los combustibles hoy tienen carga fiscal muy alta… La mitad de precio se lo lleva el IMESI”.

Labat dijo que se sigue perdiendo competitividad y que los precios están desalineados con la región.

“Seguimos estando mucho más caros que Argentina, mucho más caro que Brasil, que Chile, entonces, ¿tiene sentido esto? ¿El país no podía hacer un esfuerzo? Es mucho”.