Techo lanzó la campaña "La realidad te llama" para concientizar sobre la realidad habitacional del país

Techo lanzó una nueva campaña que visibiliza la realidad de los asentamientos de Uruguay. "Las familias que llaman llegan a Techo como la última opción. Estas familia se encuentran viviendo en extrema vulnerabilidad". El 80 % de las llamadas que reciben son de madres jefas de hogar con niños, niñas y adolescentes a cargo, indicó la encargada de Comunicación, Giovana Tomasiello.

Techo Uruguay presentó su Relevamiento Nacional de Asentamientos Informales: "Hay que valorizar el trabajo que hacen los vecinos"

Más de 60.000 familias viven en 656 asentamientos que se distribuyen en todo el territorio nacional.

La organización Techo  realizó un Relevamiento Nacional de Asentamientos Informales que arroja datos actualizados sobre la realidad de más de 60.000 familias que viven en 656 asentamientos en todo el territorio. Ocho de diez asentamientos están Montevideo, Canelones y Artigas; y es la capital del país donde está la mayor concentración.

Abordamos el tema junto a Belén González, directora ejecutiva de Techo Uruguay.

Recorrimos absolutamente todo el país junto al equipo de voluntarios. Recorrimos todos los asentamientos que figuraban en la cartografía y entrevistaron a un referente. Se contabilizó acceso a los servicios básicos y acondicionamiento urbano, además de acceso a vivienda.

Un grupo de densidad alta se compone por Montevideo, Canelones y Artigas: tienen las condiciones más críticas en términos de cantidad de viviendas en asentamientos.

El otro grupo agrupa a Maldonado, Rivera, Salto y Paysandú: son los departamentos donde existen algunas dinámicas que han generado, por ejemplo, que sean los únicos departamentos del interior que presentan macroasentamientos, de más de 200 viviendas. Tienen el doble de precariedad habitacional que el otro grupo.

Por otro lado, uno de cada dos asentamientos, en estos cuatro departamentos, está organizado. Y a nivel país, uno de cada tres asentamientos está organizado. Eso da señales de que el camino está medio allanado: las personas que viven en asentamientos informales están construyendo soluciones para sus propios barrios.

Tenemos que ver como país cómo ponemos el foco en estas iniciativas y cómo se invierte para poder salir adelante. Hay que valorizar el trabajo que hacen los vecinos en los asentamientos informales.

Planteamos cuatro propuestas. Generar un monitor de asentamientos, que nutra de información para las políticas públicas. Poner el ojo en estado de emergencia, teniendo en cuenta los riesgos y la calidad de vida. Además, tener en cuenta los departamentos del interior, más allá de Montevideo. Hay que invertir en los asentamientos que tienen comunidades organizadas.

Aquí se puede acceder al informe: https://issuu.com/comtechouy/docs/informe_preliminar_abreviado_i_rnai