Ayuda internacional prioriza a extranjeros y ha habido varios motines entre los nepalíes

Mientras tanto, las operaciones de rescate prosiguen en la nación asiática, con varios sobrevivientes milagrosos.

El terremoto del sábado y sus réplicas interminables destrozaron Nepal y dejaron una cifra de muertos que se cree alcanzará los 10 mil cuando se termine el conteo; pero los equipos de rescate siguen trabajando en las zonas lindantes al epicentro y en particular en la capital Katmandú en busca de sobrevivientes atrapados debajo de los escombros.

Las imágenes de las cadenas internacionales de noticias muestran varios milagros del estilo, como el de un hombre que pasó 80 horas atrapado entre las ruinas de su casa y al lado de tres cadáveres. Contó que tuvo que beber su propia orina para resistir, y ahora se enfrenta con la amputación de una de sus piernas.

En el caos, la población nepalí se ve relegada, ya que la ayuda internacional prioriza a los extranjeros, y se han dado varios motines y asaltos a helicópteros y ómnibus.