"El delito que sucedió no se le va a borrar a la persona, pero hay que poder transformarlo para que permita seguir con la vida", explicó la directora de la unidad.
La Unidad de Víctimas y Testigos de la Fiscalía tomó contacto con quienes fueron rehenes del hombre atrincherado la semana pasada en la peluquería "Amor Mío" en la zona de Pocitos, para realizar los primeros auxilios psicológicos tras el episodio de violencia que sufrieron.
Abordamos el tema junto a la directora de la unidad, Mariela Solari.
La unidad surge a partir de la implementación del nuevo CPP, donde las víctimas adquieren nuevos derechos y las ubica en un lugar de mayor protagonismo.
En el caso de Pocitos, se trabaja en conjunto con el equipo fiscal que investiga. En las primeras horas tomamos contacto con todas las víctimas, tanto trabajadoras como clientas. Hay que tener claro que las víctimas no son un homogéneo: el grado de afectación de un delito tiene que ver con la historia particular de la víctima y con las herramientas que tiene para afrontarlo.
El hecho irrumpe violentamente en su vida, hubo mucha violencia en poco tiempo, y eso genera miedo y angustia: esas secuelas se ven en los días siguientes. Queremos que las víctimas puedan hacer efectivo su derecho de acceso a la Justicia. La víctima tiene que poder participar en ese acceso.
Además de que los efectos se ven en los siguientes días, hay impactos que a veces no se miden en el primer momento, como los familiares de las víctimas, que ven lo que pasa por la tele. El grado de angustia y miedo… el cuerpo y la mente intentan sobrevivir, y eso, con los días, puede generar trastornos del sueño, revivir una y otra vez las mismas escenas, entre otras cosas. Y eso a veces lleva a sentimientos de culpa o vergüenza.
El delito que sucedió no se va a borrar de la vida de la persona, pero hay que poder transformarlo para que permita seguir con la vida.
Para que las víctimas puedan acceder a los derechos que les da el nuevo Código del Proceso Penal, necesitan poder estar en condiciones. Y eso buscamos nosotros. Es importante poder respetar los intereses de la persona afectada.