“Perfectamente te podía haber alcanzado una bala”, dijo una vecina de Puntas de Manga sobre persecución cercana a una escuela

“Ya de noche no está para andar en la calle. Pero como pasó hoy, no había visto”, concluyó.

La Asociación de Maestros de Montevideo (Ademu) denunció dos episodios de violencia que tuvieron lugar este jueves en las proximidades de dos centros educativos.

Una rapiña a una estación de servicio ocurrió durante el mediodía de este jueves, en la zona de Puntas de Manga. Fue durante la persecución posterior que la Policía y los delincuentes pasaron muy cerca de la escuela Escuela Nº332 y al Jardín Nº47 en la zona de Avenida José Belloni, Avenida de las Instrucciones y Carlos Linneo.

Telemundo dialogó con una vecina de la zona que relató lo sucedido. “Yo estaba en mi casa. Escuché tiros y había muchos policías en la vuelta. No vi, pero escuché. Había tremenda persecución queriendo alcanzar a los chorros”, contó la vecina a Telemundo, y agregó: “Fue tremendo porque justo había muchos niños a la hora de entrada de la escuela, fue horrible”.

Frente a esa situación, contó la vecina, “la maestra hizo entrar a todos los niños”. 

“Perfectamente te podía haber alcanzado una bala en ese momento. Fue un momento muy horrible”, dijo la mujer, y agregó que “todo el tiempo hay situaciones de inseguridad” en el barrio.

“Ya de noche no está para andar en la calle. Pero como pasó hoy, no había visto”, concluyó.

"La niña gritaba: ‘ayuda, mi hermano no respira’. Le hice los primeros auxilios al bebé, pero ya era tarde como para poder reanimarlo"

"Me preguntaron sobre la madre de los niños y les dije que nunca los dejaba solos, que siempre quedaban con alguien. Ellos no pasaban hambre ni estaban mal cuidados. La madre era trabajadora", dijo la vecina.

Una vecina de Ciudad del Plata habló con Telemundo sobre el fatal episodio en el que murió un bebé de seis meses que estaba al cuidado de su hermana de 12 años porque su madre se había ido a bailar.

“Durante la madrugada, a eso de las seis y poco, sentimos los gritos de ayuda. Notamos que era la niña de la vecina, que tenía algo entre sus brazos. Calculamos que era el bebé.

Ella decía que el niño no respiraba. ‘Ayuda, mi hermano no respira’, decía. La entré para casa, le hice los masajes de primeros auxilios al bebé, pero cuando tomé al niño ya me di cuenta de que el cuerpito ya estaba muy frío como para poder reanimarlo.

Llamamos al 911 y no teníamos respuesta. Mi pareja pidió una moto prestada y fue hasta la seccional a pedir un móvil que nos pudiera trasladar. Estamos lejos y no tenemos servicios.

Me preguntaron sobre la madre de los niños y les dije que nunca los dejaba solos, que siempre quedaban con alguien. Ella trabaja en su trabajo y lo respetamos. Pero no los dejaba solos. Pero esta madrugada quedaron solos y ocurrió esto.

Ellos no pasaban hambre ni estaban mal cuidados. La madre era trabajadora.

Los médicos consideran que puede haber sido una muerte súbita. La madre llegó sobre las 10:00 de la mañana y no caía en lo sucedido porque estaba alcoholizada”.

https://www.teledoce.com/telemundo/policiales/un-bebe-de-seis-meses-murio-en-ciudad-de-plata-habia-quedado-a-cargo-de-su-hermana-de-12-anos-porque-su-madre-se-fue-a-bailar/

Testigo del asalto a fábrica de pastas: "era como estar en una película"

Una vecina fue testigo de la rapiña del domingo de tarde, que produjo la muerte de una mujer de 36 años.

Así relató la mujer lo sucedido a Telemundo:

"Lo único que podía escuchar eran los gritos de la gente, ver la gente desesperada a través de la ventana, cómo se tiraban al piso. Es algo que voy a recordar siempre, fue como ver una película. Salió un montón de gente de la fábrica de pasta, que fue cuando vi a ver a esta persona que estaba de campera negra y casco de moto negro. Estaba como forcejeando con otra persona, que me imagino que es el ex policía que lo enfrentó. Vi cuando lo golpeaban, cuando el policía cae al piso, que cae como sentado. Vi cómo esta persona le apuntó al piso, yo estoy segura que le disparó.

Segundos después cae otra persona, unos pasos más atrás. Veo que cae la chica, que la arrastran de una esquina a la otra, la tratan de ayudar dos hombres. Abrí la puerta y salí corriendo para traerla. Cuando llegué, vi que la cosa era complicada. No me olvido más de los ojos de ella, muy claros, muy grandes. Tenía las pupilas dilatadas, miraban al cielo vacíos totalmente. Les dije que la trajeran para que espere la ambulancia en casa. En eso le levantan la remera y vemos un tiro que se veía muy claro, después tenía un poquito de sangre abajo pero no sangraba mucho"