La investigación se basó en el hallazgo de un santuario fabricado por neandertales hace 40.000 años repleto de cráneos de grandes animales.
Uno de los aspectos más interesantes del estudio de la prehistoria es que constantemente está redefiniendo y expandiendo sus límites. Durante muchos años se creyó que los neandertales, nuestros parientes más próximos en la escala evolutiva, no tenían capacidad simbólica.
Sin embargo, una nueva investigación publicada en Nature Human Behaviour demuestra que esto no es tan así como se creía.
La investigación se basó en el hallazgo de un santuario fabricado por neandertales hace 40.000 años. Este santuario estaba repleto de cráneos de grandes animales que cumplían una función simbólica. Es decir, no solo eran cráneos sino que representaban algo más, tenían una carga simbólica.
Este hallazgo obliga a revisar los conceptos de cultura y simbología, algo que se creía era exclusivo del sapiens, nuestra especie.
Los neandertales ya tenían capacidad simbólica, según demostró un equipo de científicos en el yacimiento de la cueva de la Des-Cubierta en Pinilla del Valle, España, donde se comprobó que esta especie humana ya utilizaba los cráneos de grandes herbívoros como trofeos de caza.
El trabajo de investigación, cuyas conclusiones se publicaron este jueves en la revista Nature Human Behaviour luego de 14 años de excavaciones, fue dirigido por un prestigioso equipo de investigadores entre los que se encuentra el afamado paleontólogo Juan Luis Arsuaga.
El análisis de los restos de estos homínidos que vivieron en la región hace 40.000 años permitió demostrar que utilizaban los restos de grandes herbívoros como trofeos de caza y comprobar así que ya tenían capacidad simbólica.
Todos los cráneos de este santuario de caza, entre los que destacan los de bisontes, uros, ciervos y dos de rinocerontes, fueron preparados por los neandertales siguiendo un mismo patrón: les quitaban la mandíbula y el maxilar superior, consumían los sesos y dejaban la parte del cráneo con los cuernos o astas a modo de trofeo de caza.
"Un dato importante es que pudimos constatar que la actividad se mantuvo a lo largo de, al menos, varias generaciones, lo que introduce el concepto de tradición cultural que habría pasado de generación en generación", explicó Arsuaga en la nota de prensa que difundieron el jueves las instituciones que participaron en el hallazgo.
Junto a esos cráneos aparecieron también utensilios típicos de los neandertales, así como yunques y percutores que fueron utilizados para fracturar los huesos.
Los investigadores observaron que este comportamiento de los neandertales de hace algo más de 40.000 años "no está relacionado con actividades de subsistencia, sino más bien con otras que aportan información sobre aspectos bastante desconocidos para esta especie de homínido”.
Hasta ahora, nuestra especie se había considerado como la única con capacidad para atribuir conceptos a los símbolos, una teoría que, a partir de estos hallazgos, obliga a compartir ese atributo intelectual con los Neandertales.
Este estudio abre puertas a un nuevo concepto sobre esta especie de homínido y cuestiona el papel de los humanos actuales como el único sapiens en la evolución de la vida en el planeta.