El 48% de los uruguayos que consumió antibióticos en los últimos dos años lo hizo sin receta, ¿por qué esto podría ser un problema?

La Organización Panamericana de la Salud (OPS) hizo una encuesta con la consultora Cifra con el objetivo de conocer el perfil de uso de antibióticos en la población.

La resistencia de las bacterias a los antibióticos ya es un problema de salud pública en buena parte del mundo. Y todo indica que la situación se irá agravando en los próximos años, lo que implicaría varios riesgos.

Los riesgos son que nos quedemos sin moléculas de antibióticos. Por eso tenemos que pensar en positivo y pensar que los antibióticos fueron de los descubrimientos más importantes del siglo XX, que cambiaron la mortalidad de las personas, la mortalidad infantil, que cambiaron nuestra expectativa de vida. Bien usados, cambian totalmente la medicina. Los riesgos que tenemos son volver a la época de antes de 1930, que la gente tenía una herida y podía llegar a morir por una herida", explicó Grisel Rodríguez, médica microbiológica.

Por ese motivo, la Organización Panamericana de la Salud (OPS) hizo una encuesta con la consultora Cifra con el objetivo de conocer el perfil de uso de antibióticos en la población uruguaya en los últimos dos años. Y también algunas características con respecto a las creencias, usos y conocimientos que tiene la población general sobre cómo y cuándo usar este grupo de medicamentos.

"Con respecto a las creencias que tiene la población sobre cómo usar y cuándo usar, detectamos algunos problemas, sobre todo en la forma de acceso de aquellas personas que no retiraron los antibióticos que se les habían indicado de la farmacia hospitalaria, cuando lo retiran de la farmacia comunitaria ahí aumenta mucho el porcentaje que accedía sin receta a ese antibiótico", señaló Noelia Speranza, pediatra farmacológica.

Otro gran problema que detectó la encuesta es que muchas veces son los propios médicos los que recetan antibióticos sin saber si efectivamente el paciente tiene una infección bacteriana. En el caso de las infecciones de garganta -que son el motivo de consumo más común en Uruguay- los síntomas de una infección viral y bacteriana son casi idénticos, por lo que aplicar un test rápido, barato y de acceso universal ayudaría a determinar el tipo de infección y, por ende, una receta de medicamento más apropiada.

"Tiene que haber un empoderamiento de las comunidades, del conocimiento, para saber que cuando un niño tiene un dolor de garganta no pedir antibiótico, sino pedir un estudio para que se investigue si tiene una bacteria", agregó, por su parte, Rodríguez.

Pero la resistencia bacteriana a los antibióticos también se gestó en otros planos. El abuso de este tipo de medicamentos en animales -tanto en la producción agropecuaria como en mascotas- y su mal manejo en el medio ambiente también colabora con esta problemática mundial. En el caso del ambiente, por ejemplo, tiene que ver con que los antibióticos no terminen en cauces de agua que luego se utilizan para potabilizar y beber.

"En lo que respecta a la salud humana, mejorar estas prácticas de uso son las que contribuirían a disminuir la resistencia. Pero estos otros dos eslabones son muy importantes en la forma en la que se usa irracionalmente antibióticos en animales, en la forma en la que cuidemos nuestras aguas, que tengan residuos de antibióticos", expresó Speranza.

Lo que resta ahora es seguir juntando información para delinear políticas públicas dentro del ámbito médico que mantengan a raya el consumo de antibióticos y generar estrategias para que las bacterias no vuelvan a ganarle la pulseada a los seres humanos.

 


Las Más Vistas