La NASA presentó nuevos trajes espaciales más flexibles y de talle único

Los trajes espaciales son pequeños ecosistemas para disminuir daños y generar un ecosistema en miniatura. El diseño de los trajes es un trabajo que requiere creatividad: mezclar funcionalidad con comodidad.

La vestimenta espacial que vimos tantas veces en películas y fotografías históricas, son una pieza fundamental para la supervivencia en el espacio. Fueron diseñados para dar oxígeno y una presión atmosférica estable, además de repeler la radiación.

Los primeros exploradores lunares, según cuenta la revista National Geographic, “contaban con trajes espaciales de muchas capas que se completaban con unos cubrebotas capaces de resistir temperaturas entre los 120 y los -120 ºC, además incluían unos guantes recubiertos por una fina malla de metal que protegía el material del traje, hechos -por lo general- de fibra de vidrio y teflón”. Además, los sistemas contaban con refrigeración, suministro eléctrico, un sistema de comunicación y oxígeno. Pero tenían un problema fundamental y es que eran muy pesados: 90 kilos en la Tierra y 15 kilos en la Luna.

Todo eso quedó en el pasado. Esta semana la Nasa presentó los trajes que usarán los astronautas estadounidenses para caminar en la Luna en el esperado regreso a mediados de 2024, como parte del programa Artémis.

Estos modelos son prototipos que aún no fueron probados en el espacio y cuyo diseño todavía debe ser terminado, pero tienen algunas novedades bastante interesantes.

Los ingenieros de la Nasa vienen trabajando durante años en una versión mejorada, especialmente para la eliminación de dióxido de carbono y hacerlos más flexibles y ligeros.

Como demostró la ingeniera Kristine Davis, los astronautas tendrán mucha más libertad de movimiento: podrán levantar los brazos por encima de la cabeza, lo que no era posible con los trajes Apolo. También podrán agacharse fácilmente para juntar rocas lunares sin arriesgarse a perder el equilibrio y caerse, lo que podría ser un problema en el espacio.

Otra innovación importante es que el nuevo traje está diseñado para adaptarse a todos los talles, tanto para hombres como para las mujeres, un tema que causó polémica en los últimos meses cuando astronautas mujeres no lograron completar una misión por culpa de esto.


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