Según un estudio publicado en la revista Biological Conservation, la desaparición de insectos nos debería preocupar a todos ya que son “el corazón de toda cadena alimenticia.
Los insectos habitan este mundo hace más de 400 millones de años. Sus antepasados salieron de los océanos incluso antes de que aparecieran los dinosaurios. Así fue que se convirtieron en un asombroso ejemplo de la diversidad y la capacidad evolutiva de los seres vivos en el planeta Tierra.
Se conocen más de un millón de especies, aunque la ciencia estima que todavía restan más de cuatro millones por ser descubiertas. Solo en la categoría de escarabajos, por ejemplo, la ciencia tiene descritas al menos 300 mil especies diferentes.
Pero los insectos enfrentan una crisis global con miles de especies que desaparecen cada año. ¿Por qué razones? La urbanización, el cambio climático, pero sobre todo es la agricultura intensiva la principal causa del descenso de insectos en todo el mundo.
"Si no se puede poner freno a la pérdida de especies de insectos, las consecuencias serán catastróficas tanto para los ecosistemas del planeta como para la supervivencia de la humanidad", afirmó al diario The Guardian Francisco Sánchez-Bayo, uno de los principales referentes del tema y que trabaja en investigación desde de la Universidad de Sydney en Australia. Y agregó: “Uno de los mayores impactos de la pérdida de insectos lo sufrirán las aves, los anfibios y los peces: los principales animales que se alimentan de ellos. Si pierden su fuente de alimento, todos estos animales morirán de hambre".
Pero esta es apenas la punta del iceberg. Según un estudio publicado en la revista Biological Conservation, la inminente desaparición de los insectos nos debería preocupar a todos ya que son “el corazón de toda cadena alimenticia, polinizan la mayoría de las plantas, mantienen el suelo saludable, reciclan nutrientes, controlan las pestes y muchas más cosas”.
Mientras los modelos de producción agrícolas y el uso indiscriminado de pesticidas no cambien, es poco probable que las acciones individuales reviertan el panorama internacional. Pero los científicos aseguran que cambios en nuestro comportamiento individual podrían crear un cambio en las poblaciones de insectos locales. Por eso preservar los insectos aunque sea en un pequeño jardín urbano ya es un alivio para las especies amenazadas.
Porque una cosa es segura: ya sea que los amemos o los odiemos, los humanos no podremos sobrevivir sin insectos.
El problema en números
- Una de cada tres especies de insectos está en peligro de extinción.
- Los insectos están desapareciendo ocho veces más rápido que los mamíferos, aves y reptiles.
- Cada año la cantidad total de insectos disminuye un 2,5%, lo que nos podría dejar sin ningún tipo de insecto en cien años.
- En solo diez años la mitad de las mariposas, escarabajos y abejas desaparecieron del planeta.
