La OMS insiste en que por ahora no estamos frente a un caso como la pandemia de coronavirus.
Desde hace ya varias semanas que estamos escuchando hablar mucho sobre la viruela del mono. Y este jueves, el Ministerio de Salud Pública informó que monitorea cuatro casos sospechosos.
Ahora, repasamos todo lo que hay que saber sobre esta enfermedad: síntomas, cómo se transmite, qué tan grave puede llegar a ser y cómo evitar contagiarse.
El origen del virus
La viruela del mono es de la misma familia que la viruela humana.
La viruela humana se cree que apareció en India o Egipto hace 3.000 años.
Esta enfermedad fue letal para la Humanidad hasta que se erradicó oficialmente en 1979. Fue la primera en ser erradicada.
Fue gracias a la vacunación y es considerada una de las grandes victorias de la ciencia moderna.
La viruela del mono fue identificada hace más de 50 años.
Se sabe cómo actúa y cómo se transmite.
Fue identificada en 1958 en unos monos de laboratorio y de ahí es que viene su nombre.
Sin embargo, los principales transmisores de la enfermedad se cree que son los roedores.
Las poblaciones africanas conviven con esta enfermedad desde hace décadas, pero solía ser una enfermedad endémica, que solo se encontraba allí.
Síntomas
Al principio la viruela del mono suele tener los mismos síntomas que una gripe fuerte.
Fiebre, dolores de cabeza, dolor muscular, inflamación de los ganglios y cansancio.
Pero el síntoma que caracteriza a la viruela aparece de 1 a 5 días después de la fiebre.
Se desarrolla una erupción que comienza en la cara y luego se extiende a otras partes del cuerpo.
Suele concentrarse en las palmas de las manos y las plantas de los pies.
El sarpullido va cambiando hasta formar una costra que se seca y luego cae.
Las lesiones pueden ser planas o elevadas, llenas de líquido transparente o amarillento.
El período de incubación suele ser de 7 a 14 días aunque pueden ser más.
Los síntomas suelen durar entre dos y cuatro semanas.
Desaparecen sin tratamiento.
No se transmite cuando no hay síntomas.
¿Cómo se contagia?
El virus se transmite a través de saliva y secreciones respiratorias o al tocar las costras en la piel de alguien enfermo.
La transmisión también es posible si tocás un objeto que tenga restos de fluidos.
En este sentido, en caso de tener síntomas la recomendación es aislarse.
Los recién nacidos, los niños y las personas con inmunodeficiencias pueden correr el riesgo de sufrir síntomas más graves y morir por la enfermedad.
¿Una nueva pandemia?
La OMS insiste en que por ahora no estamos frente a un caso como la pandemia de coronavirus.
Un reporte de la BBC apunta los siguientes motivos para ser optimistas.
Es un virus conocido.
Parte de la población mundial ya tiene cierto grado de inmunidad.
Baja propagación en humanos.
Es un virus estable.
Vacunas y tratamientos antivirales efectivos.
