El artista de 66 años estuvo una vez en Uruguay, durante unas vacaciones de verano en la costa este del país.
Este jueves se estrenó en Uruguay la película Hasta el Fin del Mundo, un western escrito, dirigido y coprotagonizado por Viggo Mortensen.
El actor nacido en Estados Unidos -pero que pasó su infancia en Argentina- fue entrevistado vía Zoom por Telemundo sobre este proyecto y habló acerca de un accidentado verano en Uruguay durante su niñez.
La historia gira en torno a Vivienne Le Coudy, una mujer que es interpretada por Vicky Krieps, conocida por la película El Hilo Fantasma.
"Me gustan los western, he visto cientos, tiene muchas posibilidades. Pensé: 'He visto muy poco que un western tenga como protagonista a una mujer'. Hay casos, pero es inusual que una mujer sea la protagonista. Y si lo es, tiene que ser extraordinaria, en belleza, en tener un rancho enorme, poderosa, distinta. Y Vivienne es una mujer bastante normal, común y corriente. La idea era hacer una película clásica, al estilo antiguo en la fotografía. Al principio parece que va a ser la historia típica, de venganza, pero nos quedamos con ella mucho más de lo normal. Cuando estalla la Guerra Civil en Estados Unidos su pareja se va. Normalmente vamos con él a la guerra y la mujer queda en un plano secundario, ¿pero a ella qué le pasó en todo ese tiempo? Habrá habido miles de mujeres como Vivienne, así que me pareció interesante contar su historia", explicó Mortensen.
El artista de 66 años estuvo una vez en Uruguay, durante unas vacaciones de verano en la costa este del país.
"Era un sitio muy lindo. El primer día mi papá llegó tarde y estaba tomando una siesta y esperábamos que se despertara para ir a la playa. Mientras esperábamos armamos un partido de fútbol afuera de la casa con chicos del barrio. A mí me dieron un pase, yo hacía de wing (delantero por una banda) y quería intentar tirar al arco, estiré la pierna y vino un chico muy grande, yo tenía 6 o 7 años, y este chico tenía 13 años, y era grandote, y se me cayó en la pierna. Se rompieron violentamente los huesos, parecía un tiro, y mi padre me llevó al hospital. Yo estaba en estado de shock", recordó.
Mortensen recuerda que fueron al hospital en un Jeep y él iba sentado en la falda de su padre. "Le pregunté qué iba a hacer con la pierna, si me la podía quedar. Yo tenía una imagen de que si te rompes la pierna es como los pollos, que detrás del hospital hay un montón de piernas y brazos. ¿Me la puedo quedar papá? 'Te la van a arreglar', me dijo", contó.
A raíz de esa lesión, se quedó sin poder ir a la playa. "Todos los días, con un yeso enorme de la cadera a los dedos del pie, iba con caña de pescar al muelle que estaba más cerca. Pesqué un montón, me quemé con el sol", recordó entre risas.
Aseguró que le gustaría volver al país y conocer Montevideo, Colonia y el interior del país.