La ganadora del Balón de Oro y Bota de Oro dio un discurso apostando a la diversidad y representatividad de la selección estadounidense.
Estados Unidos se quedó con un nuevo Mundial de fútbol femenino tras vencer 2 a 0 a Holanda.
Las futbolistas, las cuales habían decidido no asistir a la Casa Blanca para ser recibidas por el presidente Donald Trump, fueron recibidas en Nueva York ante unas 300.000 personas. Esta decisión la tomaron previo a salir campeonas.
Megan Rapinoe, figura de la selección y ganadora del Balón de Oro y Bota de Oro en el último Mundial fue vocera principal en el cruce contra Trump.
La deportista, activista por los derechos de la comunidad LGTBI, brindó un discurso en la celebración.
