Actualmente nuestro principal escenario deportivo se encuentra en obras que abarcan el campo de juego, los vestuarios, la lumínica y las tribunas.
El presidente de la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol), Alejandro Domínguez, volvió a Uruguay para inspeccionar las obras en el Estadio Centenario y oficializar que las finales de la Copa Libertadores y la Copa Sudamericana se jugarán en territorio nacional.
Además, realizó un nuevo anuncio: se disputará una tercera final internacional entre las dos ya pautadas. El 24 de noviembre será la final única de la Copa Libertadores femenina, cuatro días después de la final de la Sudamericana y tres días antes del encuentro cumbre de la Libertadores.
Domínguez estuvo acompañado por el secretario nacional de Deportes, Sebastián Bauzá, y el presidente de la Asociación Uruguaya de Fútbol, Ignacio Alonso.
En rueda de prensa, Alonso agradeció a la confederación por “confiar en Montevideo para ser anfitrión de un desafío tan importante”, y tomó el compromiso de “estar a la altura de la historia y lo que significan las finales”.
Actualmente el principal escenario deportivo se encuentra en obras que abarcan el campo de juego, los vestuarios, la lumínica y las tribunas.
