La mitad de las empresas señala que hoy su rentabilidad es más baja que hace un año.
La confianza del consumidor se encuentra en mínimos, pero nuestro centro ahora es la confianza empresarial. Hay cifras que muestran un claro deterioro en el clima de negocios.
Se dio a conocer una nueva edición de la Encuesta de Expectativas empresariales que realiza 2 veces al año la consultora Deloitte, que fue contestada por más de 300 ejecutivos de empresas grandes y medianas.
En esta oportunidad, se nota un deterioro significativo en la evaluación del contexto económico y el clima de inversiones, así como de las perspectivas para el próximo año. También resultó más crítica la evaluación de la gestión del Gobierno.
La proporción de respuestas negativas se acercó a los niveles vistos entre la segunda mitad de 2015 y la primera de 2016, período de estancamiento de la economía. Con apenas el 2 % de los ejecutivos marcando una valoración positiva, el saldo neto de respuestas siguió cayendo en esta edición.
Además de la visión más crítica sobre el contexto económico actual, se observó un mayor pesimismo respecto a las perspectivas económicas. También están más críticos con el clima de negocios: consideran que la evolución reciente del clima de inversiones no es buena; 65% regular, 26% malo.
Además, aumentaron notoriamente las respuestas que apuntan a un deterioro del clima de inversiones en los próximos doce meses: 56% cree que va a estar peor.
Todo esto lo contestan los empresarios sobre la economía en general, pero ¿qué pasa cuando se les pregunta sobre la situación particular de su empresa? ¿Cuán negativa es la visión?
A nivel de cada negocio también hay juicios más desfavorables que en la ultima encuesta. La mitad de las empresas señalan que hoy su rentabilidad es más baja que hace un año.
Pero lo que más preocupa es el deterioro de lo que esperan para el año que viene.
