Tiene 54 años y es psicóloga. Se casó con el candidato independiente en el año 1983. Son padres de Federico, Ignacio y Verónica.
Rossana conoció a Pablo en una reunión en la Parroquia de los Vascos. "Me cayó bien de entrada. No sabía si iba a tocar en mi grupo, pero me gustaba la idea. Sigue siendo como me pareció que era", contó la mujer del candidato independiente.
La primera vez que Mieres fue a la casa de su esposa, fue con la excusa de llevarle un casete. La mamá de Rossana tenía un jardín de infantes y la cinta tenía música de Canciones para No Dormir la Siesta.
Una de las grandes muestras de confianza que Rossana recibió cuando estaban saliendo, fue que Pablo le contara que militaba en la Juventud Demócrata Cristiana. "En esa época estábamos en plena dictadura y por lo tanto era clandestino", sentenció Aboy.
"Lo que sí fue una sorpresa es que se dedicara cada vez más, sostener durante años el estar en un partido chico, dedicarse como él se ha dedicado a pesar de los resultados. Demuestra que es vocacional", expresó Rossana.
La mujer de Mieres dijo que ninguno de sus hijos tiene vocación política, pero que cada uno a su manera apoya a Pablo.
"Es una persona muy firme, muy fuerte, de carácter fuerte pero al mismo tiempo muy sensible, muy cálido, muy honesto. Es demasiado ordenado", contó. Rossana aseguró que el punto de contacto entre su profesión, la psicología, y la de su marido es el interés por lo humano.
