El presidente dedicó gran parte de su audición radial a criticar a la oposición por su postura contraria a la llegada de los presos de Guantánamo.
José Mujica dijo que en Guantánamo hay gente que fue entregada a cambio de dinero pero que no tenían nada que ver ni con los talibanes ni con Al Qaeda. “No están presos, están secuestrados y no pueden volver a sus países ni entrar a Estados Unidos porque los republicanos lo bloquearon”, dijo el mandatario.
Agregó que Uruguay siempre fue refugio para la gente que huía de las guerras. “Sabido todo esto ¿por qué no ayudar a terminar con el problema. No das una mano porque tenés cobardía, no sentís, no te das cuenta que las campanas también dolan por ti. Que esta es una cuestión de principios, no se puede ser en el mundo tan alma podrida y que uno no tenga el coraje de dar una mano para defender una causa justa”, sostuvo.
Dijo que después de dar la palabra empezó a haber una apertura en las relaciones con Estados Unidos. “Los que están por la positiva salen a los gritos a cuestionar algo que todavía no está ni ejecutado, pero no pierden el tiempo en hablar con nosotros ¿para qué? Tiran amenazas, dicen cualquier cosa, siembran incertidumbre”, agregó Mujica.
“Nos trataron hasta de grasas, siempre tuvimos una relación de enorme respeto para con el senador Larrañaga, pero lo fueron acorralando ‘cuanto más lejos mejor’ le dijo alguien de su partido. Lo fueron acorralando y hace mucho que no sabemos de él. Esto no es por la positiva”, dijo el presidente.
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