Tres estados de México fueron los más castigados.
Los remanentes del huracán Hanna dejaron al menos dos muertos y cuatro desaparecidos en el noreste de México. La coordinación de protección civil informó el lunes que los dos fallecimientos ocurrieron en el estado de Coahuila, limítrofe con Estados Unidos. Una mujer y su hija fueron arrastradas por la corriente de un río mientras intentaban atravesar a bordo de una camioneta.
Dos de las desapariciones también ocurrieron en Coahuila, mientras que las otras tres se registraron en el vecino estado de Nuevo León.
En el vecino Tamaulipas, la crecida del río Bravo, límite natural con Estados Unidos, mantenía en alerta a las ciudasdes limítrofes de Reynosa y Matamoros.
Las precipitaciones provocaron numerosos cierres de carreteras en la región, además de deslaves de cerros e inundaciones y cortes de electricidad que afectaron decenas de barrios.
Casi 1.200 personas se encontraban en 11 refugios temporales en la región.
Unos 12,000 elementos del Ejército, la Marinoa y la Guardia Nacional fueron desplegados para atender la emergencia junto con personal de la compañía estatal de electricidad, de agua y Protección Civil.
Pese a los daños y las pérdidas humanas, las lluvias de las últimas 48 hora lograron incrementar el nivel de agua de 18 preseas en los tres estados que habían enfrentado varios meses de sequía.
Hanna se degradó el domingo a tormenta tropial a su paso por Texas y es el primer huracan de 2020 sobre la costa del Atlántico.
