La montaña está rodeada de cenizas y la operación de rescate se está haciendo muy complicada. La primera explosión fue el sábado de madrugada.
El sábado pasado por la madrugada, el volcán Ontake -el segundo más alto de Japón- entró en erupción y comenzó a lanzar piedras, humo y ceniza. Hoy los equipos de rescate encontraron cinco cuerpos más, que se suman a la lista y hacen ascender el número a 36 muertos. Los heridos son actualmente 63.
La operación de rescate es compleja, porque la zona está tapada por una capa de 50 centímetros de ceniza que dificulta el caminar, además de que los efectivos deben llevar chalecos antibalas para contener los golpes de las piedras que todavía están siendo expulsadas por la montaña.
