La compra de vacunas y la rápida logística de inoculación lo hacen ejemplo a nivel global.
Era fines de mayo. El mundo observaba impotente cómo la pandemia de covid-19 avanzaba sin obstáculos país tras país
Nueve meses despues Chile está en una categoría totalmente diferente. Para el 9 de febrero, mientras algunos países latinoamericanos como Nicaragua o Uruguay aún no habían recibido ninguna vacuna, la nación andina de 19 millones ya había administrado más de un millón de dosis. Llegó a los dos millones la semana pasada y el ritmo de inmunización continúa mejorando.
Con 12,43 personas vacunadas por cada 100, Chile tiene ahora la quinta tasa de vacunación per cápita más alta del mundo después de Israel , Emiratos Árabes Unidos , el Reino Unido y Estados Unidos .
En primer lugar, su gobierno decidió muy pronto no escatimar esfuerzos en adquirir la vacuna… cualquier vacuna. El gobierno chileno ha gestionado la compra de 35, millones de dosis hasta el momento, lo que significa que tendrá la capacidad de vacunar a más del 90% de su población.
Según el ministro de Salud de Chile, el Dr. Enrique Paris, el país ha adquirido o está en proceso de recibir 10 millones de dosis de la vacuna de Pfizer/BioNTech y otros 10 millones de Sinovac. Posteriormente, el país llegó a acuerdos con Covax (OMS), Johnson & Johnson y AstraZeneca para alcanzar los 35,7 millones en total.
Ademas, las autoridades chilenas han estado ocupadas convirtiendo cualquier espacio público que pueden en un centro de vacunación.
Además de las escuelas y los edificios gubernamentales, las autoridades de salud han abierto sitios de vacunación en todo el país en lugares como centros comerciales y estadios de fútbol.
La meta del Ministerio de Salud es vacunar a cinco millones de personas para fines de marzo y a cuatro de cada cinco chilenos antes de que termine el primer semestre de 2021.